Hace 15 años | Por --80001-- a educahistoria.com
Publicado hace 15 años por --80001-- a educahistoria.com

En el libro de Carlos Fisas, Historias de la Historia, nos encontramos esta interesante anécdota sobre los estilos gastronómicos de Felipe III y el Duque de Medina sidonia.No extraña en absoluto que muchos de los nobles y aristócratas de la época muriera de gota. Si hubieran habido controles de colesterol seguranmente que se hubieran roto todos los registros. Os animamos a que os adentréis en el reino de Gargantua y Pantagruel.

Comentarios

iramosjan

#3 ¿Le interesa? Esencialmente, la comida seguía basándose en la "triada mediterránea" de cultivos (trigo, olivo y vid) más ovejas, cerdos y aves de corral.

El trigo se comía sobre todo en forma de pan, enormes cantidades de pan para lo que acostumbramos hoy, pero las gachas y las empanadas u hojaldres también eran muy populares. El aceite de oliva era omnipresente, pero también las aceitunas, frescas o aliñadas, y en cuanto a las uvas, no solo ocurría que uvas y pasas eran casi los únicos azúcares al alcance del pobre, sino que todo el mundo, hasta los niños, bebía mucho más vino que agua (beber agua era en la mayoría de los lugares habitados una forma complicada y algo lenta, pero muy eficaz, de suicidarse)

Cuando los pobres podían permitirse carne solía ser de ave o de cordero. Las gallinas proporcionaban además huevos, una valiosa aportación de proteínas, y las ovejas leche, que no se solía beber sino utilizarse para hacer queso. En cuanto al cerdo, su importancia era capital como reserva de alimento para el invierno, y el consumo de tocino, morcillas, etc. era general. A ello hay que sumar el pescado, usualmente salado, en ocasiones ahumado o en aceite (el bacalao era tan importante para la supervivencia de los pobres que en todas las guerras de la época las pesquerías eran objeto de batallas navales y el derecho a establecer bases temporales en la costa de Terranova aparece en todos los tratados de paz); incluso los ricos rara vez podían conseguir pescado fresco si no vivían en la costa, a no ser que fuese de río como la trucha.

Las patatas no se habían popularizado todavía (y tampoco el tomate, el pimiento o el maíz) y su lugar en la cocina lo ocupaban cebollas, nabos y zanahorias. En general el consumo de frutas parece haber sido bastante reducido, salvo el de aquellas que se conservan bastantes días como las manzanas, o se pueden conservar secos como las ciruelas y las pasas.

A estos platos todo el que podía le añadía cantidades de especias que hoy nos parecen brutales. Se han sugerido muchas razones para ello, pero probablemente la principal es que no eran para nada frescas y habían perdido sabor; en el mejor de los casos el trayecto desde Asia duraba varios meses, y las condiciones en que hacían el viaje en las húmedas bodegas de los barcos no tenían nada que ver con las modernas.

D

Donde esté el salpicon de vaca, y tocino negro que se quite lo demás

D

¿Una merienda sin nocilla? Eso no es merienda ni es nada.

D

me interesa mas saber q comia el 99,9999999% del resto de la gente en aquella epoca

D

#4 gracias, mucho mas sana q lo q comian esos reyecitos!