José Maraucho acudió el pasado fin de semana al Museo Reina Sofía junto a su esposa Carmen, a la que prometió “un sábado cultural” para compensar la omnipresencia del fútbol en el hogar familiar. Ya dentro del Reina Sofía, los visitantes pidieron audioguías y José, que es hábil con los aparatos electrónicos, aprovechó una visita a los lavabos para trucar el dispositivo y sintonizar con él una emisora deportiva que le permitió seguir el partido en secreto, fingiendo sumo interés por la exposición.
Comentarios
Lo más que he conseguido yo es llegar a google desde uno de esos ordenadores que están encerrados en un mueble.
Oh, dios mío. ¡Cuántas veces lo he pensado yo!
¡Por favor que cuelgue el tutorial en la web! es un puto crack. .. lastima que sea de coña, con lo bien que nos vendría algo así.