Tras la dimisión del Comité Científico y del director científico del Centro de Investigación Príncipe Felipe de Valencia, el pasado martes, la Consejería de Sanidad ha decidido reestructurar las líneas de investigación para abandonar las que se consideren no productivas. La paradoja estriba en que, en vez de potenciar la investigación, el Consell ha decidido salvaguardar al personal...
Para Formula I, Volvo Race, Terra Mitica, Aeropuerto de Castelló, AVE, trasvase Júcar Vinalopó, visita del Papa, subvenciones a los club de fútbol, a las empresas taurinas, capital para tapar déficit de RTVV, etc. etc, nos sobra a los valencianos.
Doy fe que otros centro públicos de investigación la situación es parecida o incluso más patológica. Un personal administrativo, de los que solo se dedican a poner sellos y poner trabas a todo; más el personal técnico, más jardineros, bedeles, y personal de limpieza, necesarios pero no desproporcionado, eso sí el cesped de la entrada es precioso, más el personal de dirección por duplicado o triplicado o departamentos tan útiles como el de compras, mantenimiento de equipo informáticos (como si uno mismo no pueda hacerlo, aunque para eso tendrían que soltar la clave de administrador de tu propio equipo), formación (ya sabemos a lo que se dedican), departamento de protocolo, relaciones institucionales, etc... Cuatro investigadores para una institución desproporcionda, becarios que a los dos años les dan la patada, personal investigador subcontratado por años. Luego cuando hay que recortar, a los funcionarios ni tocarlos y a los primeros que dan la patada son los que más trabajan. Si nolvidar la burocracia, la burrocracia que retrasa los proyectos meses o te impide contratar al personal adecuado. Vamos que los cupatintas tienen que justificar que hacen algo.
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Para Formula I, Volvo Race, Terra Mitica, Aeropuerto de Castelló, AVE, trasvase Júcar Vinalopó, visita del Papa, subvenciones a los club de fútbol, a las empresas taurinas, capital para tapar déficit de RTVV, etc. etc, nos sobra a los valencianos.
Doy fe que otros centro públicos de investigación la situación es parecida o incluso más patológica. Un personal administrativo, de los que solo se dedican a poner sellos y poner trabas a todo; más el personal técnico, más jardineros, bedeles, y personal de limpieza, necesarios pero no desproporcionado, eso sí el cesped de la entrada es precioso, más el personal de dirección por duplicado o triplicado o departamentos tan útiles como el de compras, mantenimiento de equipo informáticos (como si uno mismo no pueda hacerlo, aunque para eso tendrían que soltar la clave de administrador de tu propio equipo), formación (ya sabemos a lo que se dedican), departamento de protocolo, relaciones institucionales, etc... Cuatro investigadores para una institución desproporcionda, becarios que a los dos años les dan la patada, personal investigador subcontratado por años. Luego cuando hay que recortar, a los funcionarios ni tocarlos y a los primeros que dan la patada son los que más trabajan. Si nolvidar la burocracia, la burrocracia que retrasa los proyectos meses o te impide contratar al personal adecuado. Vamos que los cupatintas tienen que justificar que hacen algo.
En fin, para qué seguir si me estoy deprimiendo.
Esto es una muestra de que, realmente, la investigación en España no se potencia (porque no da beneficios electorales a corto plazo).
#1 No sólo no se potencia, sino que se desprestigia de manera notoria!
¿Paradoja? Sería paradójico si no fuera lo que hace habitualmente.