Como con cada grupo, antes de comenzar mis clases, procedo a pasar lista por aquello del control de asistencia y los Planes Municipales de Absentismo y clase a clase descubro que me gusta más y más mi profesión: “¡en los últimos años he tenido que aprender a pronunciar más de cien nombres distintoS en al menos siete u ocho idiomas diferentes. De los veinte alumnos que tengo en esta clase, ya he nombrado a: Dahl (nombre sueco que significa Valle), Aamori (Chica del Sur de África), Osvaldo (de México), Yo Yo Ma (Chino), Fátima ...
Comentarios
Tengo un familiar que dirige un colegio publico en Torrevieja. En el colegio hay alumnos de 36 nacionalidades. Casi nada.
Desde el punto de vista de un pedagogo se debe ver una perspectiva diferente.
Referente a la muy, muy buena pregunta que hace en su post: ¿Somos realmente conscientes de la importancia de los inmigrantes para la evolución de una sociedad abierta como la murciana y la española? yo le diría que creo que en la región de Murcia deberíamos serlo, porque es alrededor de un 14% de la población. Cantidad nada despreciable.
La visión de un profe es muy diferente a la de los vecinos de una ciudad. Puede mirar "a vista de pájaro"