Explicación del proyecto que se quiere ejecutar en la carretera nacional en Menorca. En un tramo de 12 km quieren construir 4 rotondas soterradas, con un coste de once millones de euros,una de ellas en un lugar en el que no hay nada, no llega ningún camino, ni hay ningún problema de seguridad. El proyecto ganador del concurso de mejora de la carretera no contemplaba ninguna rotonda. Traducción en #1 o en el traductor de la propia web.
Una etopeya es una descripción de un personaje, generalmente aplicada a los rasgos morales o de carácter. Hemos decidido usar este término para dar título a la descripción que haremos de cada una de las cuatro rotondas enterradas que se encuentran incluidas en el proyecto de intervención de la carretera general entre Maó y Alaior, que el Consejo Insular sacó a exposición pública. Este escrito corresponde al primer artículo.
Quizás al terminar de leer esta información se comprenderá mejor por qué motivos estas rotondas situadas a diferente nivel se convierten en los personajes principales de la discrepancia que mucha gente manifiesta en relación al proyecto anunciado de la carretera. Y cuando se conozcan las características físicas y el particular origen de estas macro infraestructuras, tal vez también entenderá por qué hablamos de etopeia, es decir, de un retrato que trasciende la simple descripción material.
Qué propone el proyecto oficial?
En Biniai no hay cruce de caminos, ni ninguna entrada a ningún destino en especial. Es un tramo de recta sin ningún problema conocido. En medio de este espacio nada problemático, a 800 metros del camino de Talatí en dirección a Alaior, el proyecto del Consejo Insular dibuja una gran rotonda, situada un piso por debajo de la carretera.
Para poder hacer esta obra, hay que construir toda una estructura de puentes para que la carretera pase por encima de la rotonda, a distinto nivel. Y para poder usar la infraestructura que quedará enterrada, deben construirse, a cada lado, carriles para bajar desde la carretera y para volver a subir.
La carretera actual tiene 12 metros en el tramo que ya existen los arcenes ampliados, y 9 metros en todo lo demás. La anchura que cogerá con la rotonda y los carriles añadidos de acceso y salida es de 90 metros. Si se mide longitudinalmente, la obra afectará a unos 500 metros de la actual carretera. El área que quedaría transformada es de unos 17.000 m2.
Dado que no hay ningún camino ni entrada principal, la única explicación que se encuentra es que todo esto se quiere hacer por si alguien quiere cambiar de sentido cuando conduce.
Que proponía el proyecto técnico ganador del concurso?
Un aspecto que no ha trascendido a la opinión pública es que el proyecto que ganó el concurso convocado por el Consell, no incorporaba ninguna rotonda soterrada. Efectivamente, estas enormes transformaciones (que son el principal punto de discrepancia con la gente sensible hacia el paisaje de Menorca) fueron incorporadas después. No responden, por tanto, a cuestiones técnicas, sino a motivos políticos.
En la zona de Biniai, el proyecto ganador no proponía ninguna actuación. Sólo la ampliación de arcenes (Arcen), que se plantea para toda la carretera porque la vía pase a tener 12 metros en todo su trazado. La enorme e inexplicable rotonda soterrada aparece después, entre el momento en que se adjudica el concurso al ganador y el día que se presenta públicamente el proyecto. Efectivamente, la rotonda con puentes y carriles añadidos de bajada y remontada de Biniai incorpora por motivos políticos.
¿Qué ha propuesto el GOB?
El GOB se muestra favorable a que se haga la ampliación de arcenes y que éstos se usen como carriles de aceleración y desaceleración en la confluencia de caminos o entradas a fincas. Los arcenes ampliados son muy versátiles, porque también permiten hacer transitar los vehículos especialmente lentos (tractores, motos, etc). Esta fue la propuesta de intervención en la carretera general que la asociación hizo al Plan de Carreteras que se expuso al público en abril de 2010.
Los cambios de sentido, donde sean lógicos, se pueden hacer con el sistema de media luna. Un sistema que se ha demostrado seguro si está situado en un lugar con visibilidad, y que representa un impacto paisajístico muy reducido.
El GOB ha pedido formalmente la retirada de esta rotonda soterrada, por no estar justificada por ninguna deficiencia de seguridad, por no existir ninguna encrucijada ni tampoco ninguna entrada significativa.
Cabe recordar que estas obras previstas en el tramo entre Maó y Alaior han estimado con un coste inicial de once millones de euros.
Con medias lunas no se puede inflar gran cosa el presupuesto, lo que no permite que se puedan disimular comisiones o pedir mejoras de compensación por modificaciones/problemas en el proyecto/construcción. ¿Los del GOB piensan que los políticos son tontos?
Comentarios
Una etopeya es una descripción de un personaje, generalmente aplicada a los rasgos morales o de carácter. Hemos decidido usar este término para dar título a la descripción que haremos de cada una de las cuatro rotondas enterradas que se encuentran incluidas en el proyecto de intervención de la carretera general entre Maó y Alaior, que el Consejo Insular sacó a exposición pública. Este escrito corresponde al primer artículo.
Quizás al terminar de leer esta información se comprenderá mejor por qué motivos estas rotondas situadas a diferente nivel se convierten en los personajes principales de la discrepancia que mucha gente manifiesta en relación al proyecto anunciado de la carretera. Y cuando se conozcan las características físicas y el particular origen de estas macro infraestructuras, tal vez también entenderá por qué hablamos de etopeia, es decir, de un retrato que trasciende la simple descripción material.
Qué propone el proyecto oficial?
En Biniai no hay cruce de caminos, ni ninguna entrada a ningún destino en especial. Es un tramo de recta sin ningún problema conocido. En medio de este espacio nada problemático, a 800 metros del camino de Talatí en dirección a Alaior, el proyecto del Consejo Insular dibuja una gran rotonda, situada un piso por debajo de la carretera.
Para poder hacer esta obra, hay que construir toda una estructura de puentes para que la carretera pase por encima de la rotonda, a distinto nivel. Y para poder usar la infraestructura que quedará enterrada, deben construirse, a cada lado, carriles para bajar desde la carretera y para volver a subir.
La carretera actual tiene 12 metros en el tramo que ya existen los arcenes ampliados, y 9 metros en todo lo demás. La anchura que cogerá con la rotonda y los carriles añadidos de acceso y salida es de 90 metros. Si se mide longitudinalmente, la obra afectará a unos 500 metros de la actual carretera. El área que quedaría transformada es de unos 17.000 m2.
Dado que no hay ningún camino ni entrada principal, la única explicación que se encuentra es que todo esto se quiere hacer por si alguien quiere cambiar de sentido cuando conduce.
Que proponía el proyecto técnico ganador del concurso?
Un aspecto que no ha trascendido a la opinión pública es que el proyecto que ganó el concurso convocado por el Consell, no incorporaba ninguna rotonda soterrada. Efectivamente, estas enormes transformaciones (que son el principal punto de discrepancia con la gente sensible hacia el paisaje de Menorca) fueron incorporadas después. No responden, por tanto, a cuestiones técnicas, sino a motivos políticos.
En la zona de Biniai, el proyecto ganador no proponía ninguna actuación. Sólo la ampliación de arcenes (Arcen), que se plantea para toda la carretera porque la vía pase a tener 12 metros en todo su trazado. La enorme e inexplicable rotonda soterrada aparece después, entre el momento en que se adjudica el concurso al ganador y el día que se presenta públicamente el proyecto. Efectivamente, la rotonda con puentes y carriles añadidos de bajada y remontada de Biniai incorpora por motivos políticos.
¿Qué ha propuesto el GOB?
El GOB se muestra favorable a que se haga la ampliación de arcenes y que éstos se usen como carriles de aceleración y desaceleración en la confluencia de caminos o entradas a fincas. Los arcenes ampliados son muy versátiles, porque también permiten hacer transitar los vehículos especialmente lentos (tractores, motos, etc). Esta fue la propuesta de intervención en la carretera general que la asociación hizo al Plan de Carreteras que se expuso al público en abril de 2010.
Los cambios de sentido, donde sean lógicos, se pueden hacer con el sistema de media luna. Un sistema que se ha demostrado seguro si está situado en un lugar con visibilidad, y que representa un impacto paisajístico muy reducido.
El GOB ha pedido formalmente la retirada de esta rotonda soterrada, por no estar justificada por ninguna deficiencia de seguridad, por no existir ninguna encrucijada ni tampoco ninguna entrada significativa.
Cabe recordar que estas obras previstas en el tramo entre Maó y Alaior han estimado con un coste inicial de once millones de euros.
Seguro que algún honrado político tiene alguna parcela por la zona.
Esto tiene dos lecturas una es que son obras inútiles e irán algún empresario amigo, y la otra será que cuanto dinero se perderá por el camino.
Con medias lunas no se puede inflar gran cosa el presupuesto, lo que no permite que se puedan disimular comisiones o pedir mejoras de compensación por modificaciones/problemas en el proyecto/construcción. ¿Los del GOB piensan que los políticos son tontos?