[c&p] Una organización que dió la supremacía a España en los campos de batalla donde actuó durante casi dos siglos. El ejército español destacaba sobre todo por su infantería, cuya superioridad fue señalada incluso por el mismo Maquiavelo en sus obras, y se mantuvo casi imbatible hasta el periodo de la guerra de los Treinta Años... Podemos decir, sin temor a equivocarnos que, por lo que respecta a Europa, las fuerzas de infantería españolas fueron las únicas seriamente organizadas durante todo el siglo XVI y buena parte del XVII.
#5:
Tras la guerra de Granada, en 1496, se estableció un servicio militar nacional, que fue el primer paso en la sustitución de las huestes feudales por un ejército nacional, reclutado, pagado y controlado por el gobierno central.
Esto explica porque Fernando el Católico le pidió cuentas a Gónzalo Fernández de Córdoba "El Gran Capitán", del dinero que había gastado en la guerra. Siendo su respuesta las famosas "cuentas del Gran capitán":
Por picos, palas y azadones, cien millones de ducados; por limosnas para que frailes y monjas rezasen por los españoles, ciento cincuenta mil ducados; por guantes perfumados para que los soldados no oliesen el hedor de la batalla, doscientos millones de ducados; por reponer las campanas averiadas a causa del continuo repicar a victoria, ciento setenta mil ducados; y, finalmente, por la paciencia de tener que descender a estas pequeñeces del rey a quien he regalado un reino, cien millones de ducados.
Tras la guerra de Granada, en 1496, se estableció un servicio militar nacional, que fue el primer paso en la sustitución de las huestes feudales por un ejército nacional, reclutado, pagado y controlado por el gobierno central.
Esto explica porque Fernando el Católico le pidió cuentas a Gónzalo Fernández de Córdoba "El Gran Capitán", del dinero que había gastado en la guerra. Siendo su respuesta las famosas "cuentas del Gran capitán":
Por picos, palas y azadones, cien millones de ducados; por limosnas para que frailes y monjas rezasen por los españoles, ciento cincuenta mil ducados; por guantes perfumados para que los soldados no oliesen el hedor de la batalla, doscientos millones de ducados; por reponer las campanas averiadas a causa del continuo repicar a victoria, ciento setenta mil ducados; y, finalmente, por la paciencia de tener que descender a estas pequeñeces del rey a quien he regalado un reino, cien millones de ducados.
Para #5 Correcto... Y por cierto, que gran discurso dió el gran capitan ante la denuncias por parte de algunos altos cargos de "despilfarro" de dinero público...
Aunque lo cierto, es que el Rey Fernando tampoco tuvo mucho que ver en aquellas denuncias, aunque eso si... se comió todo el marrón, después del discursito de los perfumes, las campanas y los guantes
Me gusta meneame y siempre que puedo paso a ver que pasa con la actualidad... Pero ya conoces mi blog... Lo mio es la Historia y es dificil que salga por Meneame
Aunque con lectores como tú o tollendo y un par de ellos que menean de vez en cuando algo histórico, lo cierto es que es un placer.
Lo dicho, espero seguir manteniendo el tipo con los posts, aunque ahora que también llegó Guillermo de sus vacaciones, el blog seguro que mejora.
Estaba yo el otro día preguntándome por qué Carlos Ruiz Zafón vive en Los Ángeles, cuando me asaltó una duda: ¿es me_meneo_pensando_en_ti Arturo Pérez Reverte? Desde entonces no duermo.
Comentarios
Tras la guerra de Granada, en 1496, se estableció un servicio militar nacional, que fue el primer paso en la sustitución de las huestes feudales por un ejército nacional, reclutado, pagado y controlado por el gobierno central.
Esto explica porque Fernando el Católico le pidió cuentas a Gónzalo Fernández de Córdoba "El Gran Capitán", del dinero que había gastado en la guerra. Siendo su respuesta las famosas "cuentas del Gran capitán":
Por picos, palas y azadones, cien millones de ducados; por limosnas para que frailes y monjas rezasen por los españoles, ciento cincuenta mil ducados; por guantes perfumados para que los soldados no oliesen el hedor de la batalla, doscientos millones de ducados; por reponer las campanas averiadas a causa del continuo repicar a victoria, ciento setenta mil ducados; y, finalmente, por la paciencia de tener que descender a estas pequeñeces del rey a quien he regalado un reino, cien millones de ducados.
http://es.wikipedia.org/wiki/Cuentas_del_Gran_Capit%C3%A1n
Mahou es lo que tiene.
para me_meneo_pensando_en_ti: Muy buenas!!... ¿Vienes de vacaciones y te estás poniendo al día con los feeds? Vienes fuerte...
Un saludo y encantado de tenerte como lector
#6 , ssssshhh....... que no se entere nadie. Será nuestro secreto.
Para #5 Correcto... Y por cierto, que gran discurso dió el gran capitan ante la denuncias por parte de algunos altos cargos de "despilfarro" de dinero público...
Aunque lo cierto, es que el Rey Fernando tampoco tuvo mucho que ver en aquellas denuncias, aunque eso si... se comió todo el marrón, después del discursito de los perfumes, las campanas y los guantes
Un saludo
Me gusta meneame y siempre que puedo paso a ver que pasa con la actualidad... Pero ya conoces mi blog... Lo mio es la Historia y es dificil que salga por Meneame
Aunque con lectores como tú o tollendo y un par de ellos que menean de vez en cuando algo histórico, lo cierto es que es un placer.
Lo dicho, espero seguir manteniendo el tipo con los posts, aunque ahora que también llegó Guillermo de sus vacaciones, el blog seguro que mejora.
Un saludo
Como decia aquella copla de los Tercios del SXVI: "España mi natura, Italia mi ventura, Flandes mi sepultura"
#1 Mahou es pis de gato tiñoso. Donde esté Estrella Galicia...
por aquí aun se acuerdan de ellos
Estaba yo el otro día preguntándome por qué Carlos Ruiz Zafón vive en Los Ángeles, cuando me asaltó una duda: ¿es me_meneo_pensando_en_ti Arturo Pérez Reverte? Desde entonces no duermo.
#3 , cierto, tengo unos cuantos atrasados.
Encantado de conocerte y gracias por comentar.
#12, che bello!
#11, donguorri: nadie nos ha leído...
una idea pal proximo comentario en tu blog: la "guardia mora" del extinto. tambien muy imperial y muy eficiente, aunque posterior