Desastre. Hay veces que las cosas no pueden definirse de otra manera. El 19 de diciembre de 2010 se celebraban elecciones presidenciales en Bielorrusia. Algunos creían escuchar campanas de cambio tras las bambalinas de la “última dictadura de Europa”. Al final, lo que resonó fue el estruendo de la represión. La melodía recuerda a los peores tiempos; la canción suena a viejo estalinismo. Quién marca el ritmo y por qué sigue siendo la gran incógnita. El director, eso sí, tiene nombre: Alexander Lukashenko.
Comentarios
Documento de Amnistía Internacional sobre la situación: http://www.amnesty.org/en/library/asset/EUR49/015/2010/en/030a739a-b838-4db3-af41-1c7b157b3bc0/eur490152010en.html
#1 La noticia es erronea. Lukashenko no pertenece al Partido Comunista ni hubo torturas ni nada que se le parezca.
#2 Pfffff gracias por hacerme reír.