La trama de las ITV intentó influir en otros negocios, como inspecciones de eficiencias energéticas o control de contaminación atmosférica. Un informe del Servicio de Vigilancia Aduanera, que llevó a cabo las investigaciones, sitúa a Oriol Pujol como colaborador de los intermediarios, aspecto negado desde Convergència Democrática de Catalunya (CDC).