Hace 10 años | Por --394475-- a eldiario.es
Publicado hace 10 años por --394475-- a eldiario.es

Si algo nos está mostrando la ficción contemporánea en estas últimas series es que la imagen de chica complicada necesita, forzosamente, un problema mental al que aferrarse. Al que se aferran los guionistas, claro está. En el caso de Homeland, esto ya comienza a criticarse desde algunas esferas: ¿cumple Carrie, como paciente de un trastorno bipolar, con el criterio de verosimilitud?, ¿o simplemente "se chala" cuando a los guionistas les conviene que haga algo impredecible que no pueden justificar de otra manera? Pero hay otros interesantes...

Comentarios

D

#3 ¿Has votado negativo por ese motivo?
¿Te has leído el artículo? ¿Has visto que es una crítica precisamente a eso mismo?

professorBestFan

#4 Estará histérica. No te preocupes, yo te voto en compensación.

D

#6 Aviso: Spoilers sobre The Newsroom:

Quizá la palabra no era histéricas sino desquiciadas.
La ex-rubia y Mckenzie son los personajes femeninos con más peso en la serie y participan en las tramas princpiales y tienen sus propias subtramas. Y están fatal de lo suyo, constantemente.

Sloan tiene mucho menor peso (hacia el final de la 2º gana algo más de protagonismo), y esta desquicida también.
No para de hablar, de meter la pata, de tener salidas de tono constantemente, de ser tratada casi como una lunática.

La dueña del periódico (Jane Fonda) en el capítulo que aparece termina gritando, y en la 2º aparece flipando porque ha fumado marihuana. Excéntrica no, para mi desquiciada (pero mucho menos que el resto).

Estoy muy de acuerdo con la opinión de este artículo:

¿Qué le han hecho a don Aaron las mujeres para que todos los personajes femeninos de 'The Newsroom' sean en el fondo la misma tía histérica e incompetente? Y sin embargo, sin ellas no habría nada, porque su inoperancia cognitiva y sentimental esconde una genialidad que, efectivamente, no tiene demasiado sentido. ¿No es ése el machismo definitivo, el "la que manda en casa es mi señora, que por otro lado es gilipollas", el piropo denigrante, la ridiculización extrema? ¿Por qué Mackenzie McHale, Maggie Jordan y Sloan Sabbith están tan desquiciadas? ¿Es necesario? ¿Aporta algo?


Me temo que unos personajes tan incoherentes y extremos no son más que otro sermón del todopoderoso guionista y productor. Que Sorkin nos está revelando la verdadera (SU verdadera) verdad sobre la condición femenina. Suena durísimo, pero no encuentro otra opción, a menos que cada una de ellas sea un personaje-mensaje a sus exnovias, versiones todas de la misma loca primigenia desajustada."

http://www.elmundo.es/blogs/elmundo/asesinoenserie/2012/09/22/a-favor-y-en-contra-de-the-newsroom.html

D

Hace un repaso de algunas protagonistas de series norteamericanas cuyo mayor rasgo es estar como unas maracas (y por qué es así).

Para mi un ejemplo no tan obvio es The Newsroom, en la que todas las mujeres que aparecen están histéricas el 99% de las veces, y sin la ayuda de un hombre no pueden resolver sus problemas. Lo que para mi lo hace especialmente grave porque la serie va de progresista y es profundamente machista.

D

#2 Sloan Sabbith no es una histérica, es una excéntrica. La camarera compi de piso de la ex-rubia ahora pelirroja no es una histérica. La nueva novia del redactor, la que conoció en el séquito de Romney no es una histérica. La dueña del periódico no es una histérica.

En la serie hay dos, contadas, que sean unas histéricas: la ex-rubia que se fue a África y la prometida de Will Mcavoy. Que esas dos hagan tanto ruido que parezca que todas son iguales, concedido, pero nada más.

Lamento la vaguedad de los nombres de los personajes pero sólo me acuerdo de Will y de Sloan. De Will por ser el prota y de Sloan porque yo quiero una así para mi cumple. Está buena que te cagas, es inteligente, quirky, espontánea y genial.

professorBestFan

Como si se hubieran ido alguna vez. Ah, perdón, habláis de ficción.

Communard

#1 Sigamos reforzando esa visión de la mujer, estos son los pilares del machismo, casi no se perciben como tal, pero hacen daño, mucho.