Hola, La del confesionario es una de mis secuencias favoritas de Amarcord. Siempre me he preguntado qué razones llevan a alguien a arrodillarse frente a un sacerdote y declararse culpable y, sobre todo, siempre me he preguntado qué razones llevan a alguien a hacerlo libremente, sin mediar presión ni tortura.