No hace falta un gran estudio sociológico. Basta por pasear por las calles de los barrios de cualquier ciudad y entrar en sus restaurantes y mercados para darse cuenta de que las personas de otros países y culturas siempre enriquecen la gastronomía del lugar al que van a vivir. Es algo tan natural y antiguo como la propia inmigración. Si hace unas décadas a Madrid o Barcelona llegaban los platos del sur de quienes se desplazaron allí en busca de trabajo y una vida mejor, después sería el turno de personas venidas de otros países
Comentarios
mejor no sé. más barato, seguro.
#2 Y más variado.
Cómo fabricar una noticia de la nada.
Novedad mundial, el centro de Londres no es una zona residencial, por lo que es más fácil encontrar comida rápida que verdura fresca.
Segundo descubrimiento, en el país inventor y devorador de preprocesados, en los barrios con gran afluencia de nuevis inmigrantes existen más tiendas de producto fresco. Coño, tampoco mis padres van al mcdonalds y les horrorizan los productos precocinados, y no son inmigrantes, simplemente no han estado expuestos a esa cultura.
Se les olvidó decir que los hijos de estos inmigrantes, sí van a ser grandes consumidores de la comida basura.
Al peso... ¿es que si o es que no?.
https://somosmalasana.eldiario.es/numero-de-pizzerias-y-grado-de-turistificacion-de-una-zona-la-relacion-jamas-contada/
Hay una lucha durum vs kebab, solo quedará uno.
En los barrios con más inmigración hay una merienda de negros
#1 "En MNM desde julio de 2019" y te estrenas con este comentario taaan original y taaan gracioso.