«Antes podías sentarte en el banco tranquilamente a leer, pensar… sin molestar ni agobiar a nadie. Ahora solo puedes permanecer un instante para hacerte la foto y dejar paso al siguiente». Son palabras de Paloma, y el asiento al que hace referencia es el afamado banco de Loiba, en Ortigueira, La Coruña.Éste es un claro ejemplo del disparatado turismo en la era de internet. Una fotografía de un prestigioso concurso y una campaña de Ikea han conseguido que un sencillo banco con unas vistas privilegiadas, se convierta en una auténtica atracción.
Comentarios
#4 Gracias, cambiaron la url, por eso no lo detecté... raro que un artículo de autor estuviera duplicado
cierro
#0 ¿Y acaso este meneo no es duplicado? Y tú ¿acaso eres un perfecto turista?
Y tú ¿acaso eres un perfecto turista?
yorokobu.es#2 #1 enlace? no lo encontré buscando
#3 Repasa de nuevo #1
Si, duplicado
Yo no soy un turista, yo soy un viajero.