Una de las empresarias de más éxito en EEUU llevó a sus tres hijos a África a convivir en un campo de refugiados. Su intención: darles una perspectiva de la realidad que las clases privilegiadas no ven en los informativos. Todo le salió al revés, porque la caridad no es un guion de cine. Cada vez que se aventuraban al campo para donar botellas de agua, desataban una batalla campal. Si llevaban balones de fútbol, originaban una confrontación sangrienta para ver quién robaba el esférico. Terminaron siendo evacuados por un equipo de guardaespaldas
Comentarios
¿Dónde està el resto del artículo? Deben ser 300 palabras. Un aquí te pillo aquí te mato.
La desesperación ajena como souvenir.
Yo conozco unos cuantos que van a venir a bcn a ver que pasa, que morbosos
Y matizo: los niños ya estan cansados de ver como trabajan los esclavos en nuestras fábricas.