En los años más álgidos de la burbuja inmobiliaria una cuarentena de familias de Sant Adrià de Besòs invirtieron sus ahorros en lo que el ayuntamiento prometía y el vecindario pensaba que podría ser la vivienda de su jubilación o que podría dejar en herencia a su descendencia. Nada más lejos de la realidad.
Comentarios
españa nos roba!!!! o como "en todos los sitios cuecen habas"
Esto no puede ser real o tiene truco
o es para alucinar