Todos los grandes museos del mundo tienen un puñado de obras maestras ligadas a su nombre. El Prado, rico en joyas insuperables del arte antiguo, tiene en los retratos de Adán y Eva de Durero una de sus piezas señeras. Confinadas en el taller de restauración del Prado durante los dos últimos años para ser sometidas a una delicada intervención de restauración , las dos obras han vuelto hoy a las...
Comentarios
Ellos querían volver al Jardín, pero tendrán que conformarse con el Prado...