La mayoría de nosotros lo conocemos como el gas que hace flotar globos, dirigibles y superhéroes gigantes en los desfiles festivos. Pero el helio también se usa para purgar motores de cohete para la NASA y las fuerzas armadas, y es crucial para equipos de buceo, aceleradores de partículas y equipos de resonancia magnética. La mala noticia, dice National Research Council, es que se acaba. La mayor parte del helio del mundo se encuentra bajo las Grandes Llanuras de Estados Unidos, donde está atrapado en gas natural.
|
etiquetas: helio , ciencia , divulgación