El secretario de Estado de Seguridad Social, Tomás Burgos, ha cursado estudios en Medicina, pero no se licenció, aunque se decía que sí. Elena Valenciano, vicesecretaria general del PSOE, figuraba como licenciada en Derecho y Ciencias Políticas, pero no acabó ninguna de las carreras. La ambigüedad a la hora de hablar, intencionada o accidental, está dando lugar a que algunos políticos vean inflados sus respectivos currículos.
Comentarios
País de locos, mientras los mejor preparados mienten a la baja en su currículo para encontrar trabajo, nuestros políticos lo inflan sin ton ni son.
No es un problema con la "ambigüedad a la hora de hablar" sino con la falta de sinceridad e integridad de aquellos que están faltando a la verdad.
O estás por estudiar o estás por medrar y pelotear en el partido, todo a la vez no es posible.
La ambigüedad y sobre todo, la falta de consecuencias.
Parece que los elijen en base a ver quién miente más en su curriculum, así menos que tienen que enseñarle después.