- La plataforma de partida elaborada por CCOO, y que han llevado a la mesa de negociación junto a UGT, plantea la eliminación de la conciliación, la eliminación del derecho a la desconexión digital y entregan a la patronal la voluntariedad de realizar horas extras de los trabajadores, a la vez que reducen su compensación económica.
- Todo ello como consecuencia de incluir en el convenio la regulación de las guardias, la disponibilidad, turnicidad, nocturnidad y trabajo en festivos y fines de semana. De esta forma CCOO entrega a los empresarios el control absoluto del tiempo de los trabajadores.
- Además mantiene al sector en la precariedad salarial, manteniendo por un lado la ambigüedad en la clasificación profesional que firmaron en el anterior convenio, y por otro, unos sueldos en las categorías de acceso a la profesión que bordean el SMI, para el personal de un sector que requiere de alta cualificación.
El pasado 19 de octubre desde la Federación de Servicios de CCOO se hizo una manifestación pública de "hartazgo" ante la precariedad laboral que se vive en el sector TIC, y anunció que se "plantaban" en la última reunión de negociación del Convenio Colectivo de Consultoría para pasar a "actuar en todos los ámbitos posibles". Sin embargo, en el mismo comunicado reconocen abiertamente la precariedad existente en el sector, fruto de unas condiciones laborales y salariales que ellos mismos firmaron:
Extracto del comunicado de CCOO
Tales manifestaciones no son más que el preludio de la firma de un nuevo convenio de traición en el sector TIC, con el que ahondar en la explotación laboral, y es la forma en la que este sindicato amarillo pretende engañar a los trabajadores, queriendo aparentar que la firma del mismo se debe a la presión de sus palabras, y de forma indirecta, que es la patronal la que ha cedido cuando en realidad se están incorporando todas sus pretensiones.
Si hacemos un leve ejercicio de memoria, la situación de precariedad laboral que vive el sector es producto y consecuencia directa de las firmas de los diecisiete anteriores convenios sectoriales, donde CCOO y UGT ha ido traicionando y empeorando las condiciones laborales de los trabajadores que ahora dice querer defender. Como muestra de tales traiciones podemos poner:
- la pérdida más del 20% de poder adquisitivo que firmaron en el último convenio
- la desvinculación de las subidas salariales del IPC
- así como la introducción de absoluta ambigüedad en la definición de las categorías profesionales, lo que otorgó a la patronal impunidad para rebajar más los salarios, encuadrando a los técnicos en contratos con categorías inferiores (que enseguida quedaron por debajo del SMI) para realizar tareas de orden superior que deberían estar mejor pagadas.
Además, para la firma de traición de ese XVII Convenio del sector TIC hubo que esperar casi una década, lo que nos da idea del nivel de servilismo de este sindicato a la patronal, dada la inexistencia de movilizaciones para presionar la negociación durante todos esos años, y por tanto la renuncia a mejorar las condiciones de los trabajadores. Aquella firma también se hizo con la inexistente participación de las plantillas del sector en la aprobación de su firma, donde CCOO no se aventuró a someter a votación ni a sus propios afiliados, sabedor de antemano de que tal acuerdo era perjudicial, como ahora reconocen.
Pero si los actos pasados de ese sindicato amarillo lo colocan del lado de la patronal, como aliado contra los trabajadores para establecer dichas condiciones de precariedad en el sector, no son menos sus actos presentes. Así, analizando la Plataforma del 18º Convenio Estatal TIC que CCOO ha llevado a la mesa de negociación, podemos ver cómo en la misma se incluyen medidas tan lesivas para los trabajadores, que difícilmente se pueda entender que partan de un sindicato cuyo cometido es, supuestamente, la defensa de los mismos.
Análisis de la Plataforma
En la plataforma con las propuestas de CCOO que lleva a la mesa de negociación para renovar el convenio sectorial ya se pueden ver recogidos los deseos de la patronal, que de esta forma, ésta se asegura ganar terreno en la precarización laboral, pues sólo tiene que "ceder" ante las pretensiones del supuesto sindicato de trabajadores.
Entre las medidas que profundizan en la precarización del sector podemos destacar:
Guardias
En la plataforma de CCOO se introduce la regulación de las Disponibilidades e Intervenciones mediante una definición que perfectamente pudiera estar redactada por la patronal:
Artículo J. Servicio de guardias.
Disposiciones generales. Con el fin de que las empresas puedan cumplir los compromisos contraídos con sus clientes, que vienen impuestos por las características propias del servicio contratado, la Dirección de la Empresa, previa información y consulta con la representación legal de los trabajadores, podrá establecer un servicio de guardia presencial o no presencial, en fin de semana, festivos o en días laborales fuera del horario habitual de trabajo de la persona, con el fin de atender las incidencias que pudieran presentarse en los servicios contratados por los clientes y que se consideren necesarios.
Al introducir la regulación de las guardias, entregan a la patronal la voluntariedad para el trabajador de trabajar fuera de su horario, cargándose de un plumazo la conciliación familiar y personal por un lado, además de impedir que los trabajadores puedan negociar la compensación económica eliminando la fuerza negociadora que la voluntariedad otorga. Constituye así una de las vías para encubrir la realización obligada de horas extras, donde además proponen reducir la compensación económica.
Junto a las Guardias, incluyen el concepto de Disponibilidad, dejando sin efecto el derecho a la Desconexión Digital, sin ni siquiera concretar compensación económica.
Trabajo a turnos, trabajo nocturno, en fines de semana y días festivos
Con esto, CCOO concede a la patronal todo un arsenal de nuevas fórmulas para establecer diferentes jornadas de trabajo obligatorias, que hace imposible la conciliación familiar. Esto obligará a trabajadores y trabajadoras, que actualmente no se lo plantean, a reducir sus jornadas y sueldo para poder cuidar de familiares dependientes. Con la regulación de turnos, se abre el melón de la flexibilidad según el interés de las empresas, y se incidirá en un mayor incremento de la desigualdad por razones de sexo.
Según su redactado, puede establecerse a los nuevos contratos la obligatoriedad de hacer turnos para los trabajadores, lo que implanta de facto una discriminación en las plantillas con la división entre trabajadores nuevos y antiguos, tan pernicioso para la unidad y la fortaleza del conjunto de la clase trabajadora, que incentivará más aún el despido de los antiguos, y que a la larga, en un sector de tan amplia rotación de personal terminará por consolidar la obligación de trabajar a turnos a todo el sector. Se pueden observar claramente en esta regulación propuesta por CCOO características propias de la patronal para precarizar a todos a medio y largo plazo, con su estrategia de división para reducir la organización y la resistencia de los trabajadores a sus imposiciones.
Además, introducir en el convenio la nocturnidad sólo puede calificarse como una aberración, pues condena a los trabajadores a un deterioro grave e irreversible de la salud, razón por la que debería estar prohibido. Siendo poco justificable en nuestro sector, por las posibilidades que ofrece el teletrabajo de poder desempeñar servicios nocturnos desde ubicaciones con otros husos horarios.
En realidad, con la turnicidad y trabajo en festivos se está encubriendo las horas extras como horas habituales, que mediante este nuevo sistema dejan de ser voluntarias, y que además reducen la compensación económica (además de la fuerza de los trabajadores para negociar otra compensación superior). Por poner un ejemplo, la compensación que el actual convenio establece para trabajar un fin de semana sería de un aumento mínimo del 75% de la hora (Hora Extra), que en el sistema propuesto por CCOO se rebajaría al 25% (Turno en festivo).
Teletrabajo
Con la regulación del teletrabajo, la patronal persigue la transición hacia un modelo productivo que desvincula a los trabajadores del puesto de trabajo, para transformar las relaciones laborales (y sus derechos) en mercantiles (falsos autónomos sin derechos), transición a la que se hace referencia con el término Uberización con la que pretende acabar con absolutamente todos los derechos laborales (nómina, descansos, jornada, festivos, vacaciones, etc.) . Como en el anterior apartado, CCOO hace un favor a la patronal regulando éste en beneficio de los empresarios. En el redactado, se :
- Olvida la cuestión de compensación de gastos, que queda nuevamente relegada a la negociación posterior.
- Facilita a las empresas un considerable ahorro de costes en instalaciones mediante su externalización estableciendo "una red concertada con terceros" donde desarrollar la jornada laboral. Beneficio para las empresas a cambio de ninguna mejora para las plantillas.
- Elimina para los trabajadores el carácter voluntario y reversible del teletrabajo, pues define la posibilidad de incluir de inicio en el contrato de trabajo la modalidad de teletrabajo. Con lo que nuevamente, la patronal impone con la ayuda de CCOO divisiones en el seno de las plantillas, y en un contexto de alta rotación como el actual, es una de las medidas con las que impulsar la uberización, facilitando una la paulatina conversión de los trabajadores a freelance (falsos autónomos).
- Permite la inclusión de sistemas de vigilancia en las viviendas de los teletrabajadores.
Jubilación Anticipada
También CCOO pretende que se incentive la jubilación anticipada con gratificación de cuatro mensualidades a las personas que se adhieran. Esto constituye una nueva modalidad de ERE encubierto. Una pretensión de la patronal con la que facilitar la sustitución de puestos de trabajo bien remunerados por personal con precariedad salarial, a la vez que adelanta unos años el trasladar el pago de nóminas, que pasa a ser soportado por los trabajadores en su conjunto, a través de las cuentas públicas, sostenidas principalmente por los trabajadores.
Temporalidad
Respecto a la temporalidad, CCOO, quiere regular de manera que se legaliza el fraude en la contratación por obra y servicio, en lugar de combatirlo. Se limita a estipular la regulación a indefinidos de contratos de más de 10 años, y para posteriores contratos, prolonga un mínimo de 6 años la espera para su regulación, empeorando la legislación actual, que se limita a 3 años. También propone facilitar el uso de contratos de duración determinada por circunstancias de la producción para el personal Administrativo y Especialistas de Oficina, y fomenta el uso de contratos formativos y prácticas no laborales.
Subcontratación
Con la introducción de éste artículo, igualmente, legalizan la cesión ilegal, permitiendo interponer a empresas subcontratadas para la realización de servicios estructurales, es decir relativos a la actividad principal de la empresa.
Subidas Salariales
En cuanto a las propuestas de incremento salarial, para 2020 establece subidas desde el 1,5% hasta el 3%, éstas últimas para las categorías inferiores, y para los años 2021 al 2023, propone una subida del 3%. Es decir, continúan en la senda de lo firmado en el anterior convenio desligando las subidas del incremento del coste de la vida, y permitiendo la pérdida de poder adquisitivo, en un contexto de inflación que en 2021 podría llegar al 7%. Para ver un mayor detalle de este aspecto de la plataforma se puede consultar este otro artículo "Pérdida de poder adquisitivo generalizada. Su traslación al Convenio TIC".
Comisiones paritarias
A modo de ridícula contraprestación a cambio de vender a los trabajadores, CCOO propone la conformación de comisiones de trabajo paritarias entre sindicatos firmantes y la patronal, con los que incrementar el número de liberados sindicales.
Definen así hasta 3 comisiones:
- Comisión Sectorial de Igualdad de Género
- Comisión paritaria de formación sectorial
- Observatorio Sectorial TIC
Lo que olvida tratar CCOO en su plataforma
Como hemos visto, CCOO ha procurado reflejar correctamente en su plataforma todos los deseos de la patronal, lo cual hace que se olvide de las cuestiones que los trabajadores necesitan:
- Recuperar el 20% de poder adquisitivo que entregaron a la patronal en la firma del anterior convenio
- Eliminar la ambigüedad en la clasificación profesional por grupos y áreas para impedir el abuso en la utilización de las categorías con sueldos ínfimos, también firmado en el anterior convenio.
- Acabar con la temporalidad, la subcontratación, y el fraude con las cesiones ilegales consentidas por la propia administración pública, que constituyen la base del modelo productivo de las empresas del sector, y de la precariedad de sus plantillas.
- Dignificar las tablas salariales a sueldos acordes a la ingente inyección de dinero público que entrará en las empresas del sector destinados a la digitalización de la economía.
- Indexar el sueldo al IPC, en un contexto de inflación récord prevista para este año.
- Regular la rebaja de la jornada semanal sin rebaja de sueldo, como fórmula de repartir la riqueza del aumento en productividad derivados de las nuevas tecnologías y la automatización, y consecuente reducción de horas de trabajo necesarias.
En definitiva
Si nos atuviésemos a la lógica de lo que tendría que ser la plataforma de inicio para la negociación de un sindicato que dice defender a los trabajadores, debería ser una plataforma de máximos, que recogiera las mayores pretensiones de los trabajadores para mejorar sus condiciones laborales, de forma que durante la negociación se obtuviese el mejor convenio posible, aunque durante la misma tuvieran que dar concesiones a la patronal.
Sin embargo, las concesiones que CCOO presenta son tan lesivas a los intereses de los trabajadores, que podría decirse que ha sido escrita por la patronal, pues recoge la mayoría de los deseos de la misma. Y partiendo como lo hace de un sindicato, podemos decir que es una traición sumarísima hacia los trabajadores que se supone debe defender. Con esta forma, la patronal, con solo aceptarla, ya sale ganando, sin que los trabajadores hayamos conseguido nada a cambio. Eso sí, para ellos se procuran crear nuevas comisiones paritarias donde incluir más liberaciones sindicales.
Con esta plataforma, CCOO confirma, una vez más, que es un mero instrumento de la patronal para legalizar el sometimiento a los trabajadores a cada vez mayores tasas de explotación, pues entrega a los empresarios la disponibilidad absoluta de la vida de los trabajadores del sector.
Los trabajadores debemos tener bien presente que la situación laboral de precariedad generalizada que vivimos, es consecuencia directa de las políticas de conciliación donde los sindicatos mayoritarios (UGT y CCOO) venden los derechos laborales a cambio de prebendas, subvenciones millonarias, y como en el caso del sector, liberaciones sindicales. Y que si no queremos seguir perdiendo derechos, debemos cada uno de nosotros ser responsable de luchar en contra de esos sindicatos podridos, abandonarlos y repudiarlos ante nuestros compañeros para que dejen de ser mayoritarios, y que abandonen de una vez las mesas de negociación de los convenios. Debemos dar cada uno de nosotros el paso adelante para organizarnos colectivamente en torno al sindicalismo de clase, organizar conjuntamente con nuestros compañeros de trabajo listas de candidatos a las elecciones sindicales, desbancar a los sindicatos traidores en cada una de nuestras empresas, y desalojar a los sindicalistas vendidos de esos puestos donde tanto daño hacen al conjunto de la clase trabajadora.
Compañero/a, el sindicato eres tú. Sin tu implicación en la construcción de organización con tus compañeros/as, no queda otra que seguir perdiendo.
Tú decides, está en tu mano.
Alternativa Sindical de Clase