Dale y Leilani Neumann, una pareja de Wisconsin enjuiciada por homicidio negligente, encara una pena de hasta 25 años de cárcel por la muerte de su hija Madeline, de 11 años,en marzo de 2008 por una diabetes no diagnosticada. Los padres deberían haber llevado a la niña enferma al hospital porque no podía caminar, hablar, comer ni beber. Madeline murió en el piso de la casa rural de la familia mientras un grupo de gente oraba a su alrededor. Cuando dejó de respirar alguien llamó al 911. Los Neumann dicen que las curaciones son atribuibles a Dios
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