Las madres recibían entre 1.500 y 2.000 euros por sus hijos, el precio que pagaban las familias compradoras dependía del sexo del bebé: un varón costaba 25.000 euros, mientras que por una chica se pagaban entre 18.000 y 20.000 euros. En el marco de la operación han sido detenidos también médicos, notarios y abogados que facilitaban las adopciones ilegales.
Comentarios
20.000 euros? Esos culitos tersos bien que los valen...
Un tiro en la pierna a cada uno
Pocas cosas hay mas despreciables... espero que caiga sobre ellos todo el peso de la ley.