El entorno de la Ciudad Universitaria de Madrid se llena cada día, desde el inicio de las clases, de cientos de jóvenes que celebran el conocido periodo de novatadas, en el que los recién llegados son objeto de bromas por parte de los estudiantes más veteranos, que en algunos casos pasan a convertirse en vejaciones. Los novatos, claramente identificados, van en grupos y generalmente disfrazados o vestidos de las formas más rocambolescas, desde travestidos de mujer -en el caso de alumnos varones-, de bebés con pañales o con los pijamas puestos.
Comentarios
Las que llaman hoy día 'novatadas' no tienen ninguna gracia. Antes, se gastaban bromas al novato, pero buscando estrechar lazos con él. Ahora, ¿cómo vas a estrechar lazos con un novato al que obligas a lamer un vómito, o al que le pringas de la cabeza a los pies de gel o de ariel líquido?
A mí no me hicieron ninguna novatada los subnormales estos, porque les dejé bien claro que les metía dos yoyas que se iba a enterar.
#2 Novatadas, estrechar lazos... mejor no demos ideas.
No obstante, a pesar de la prohibición, siguen existiendo novatadas de mayor o menor importancia, buenas y malas, sobre todo en colegios mayores y residencias privadas. Además, cada año se repiten los enfrentamientos y rivalidades entre determinados colegios masculinos o las conocidas como 'invasiones', en las que estudiantes de colegio masculino entran de noche, y sin permiso, en los colegios de chicas.
Panda de pijos.
Yo me comí mis dos mesecitos de novatadas, me lo pasé estupendamente, y... por mí, que las prohíban de verdad.
Bromas son bromas... ¡Pero el ojo que aparezca!