Según se detalla en la sentencia, la empleada despedida trabajaba como gerente en un supermercado Mercadona de León desde el año 2001. En 2023, cogió una baja médica por ansiedad. Tras algunos meses, Mercadona contrató a una agencia de detectives privados para vigilar sus actividades cotidianas mientras estaba de baja. En el informe, los detectives dejaron constancia de que la trabajadora había ido a la peluquería, vestía pulseras y anillos, hablaba por teléfono e incluso había hecho compras en un supermercado Lidl.
|
etiquetas: peluquería , despido , mercadona , derecho laboral