En la edición de El País de hoy se publica un artículo que he escrito sobre el tema de las descargas de libros no autorizadas (que los interesados insisten en llamar “piratería”): Malas y buenas noticias.
Lamentablemente, las presiones del espacio han hecho suprimir una frase, que contenía las “buenas noticias”. Reproduzco aquí el último párrafo, cuya primera parte es la que desapareció:
La situación actual, plagada de descargas no autorizadas, tiene un aspecto positivo: ¡existe la demanda!, ¡hay gente a la que le encanta leer!, ¡en pantalla se puede leer tanto o más que en papel! ¿No será que fallan las alternativas de negocio? Cada vez que hay nuevos cálculos del acceso a obras sin autorización se habla de la “merma de negocio”, y no es así (como ya se ha visto repetidamente en el caso de la música): no toda obra descargada ilegalmente habría sido comprada, y menos a esos precios…
#5:
Las editoriales van a seguir el guión de las discográficas punto por punto. Primero no fue un problema porque en España no había ebooks. Cuando la gente empezó a comprarlos en masa por Internet crearon la peste esa de Libranda, cuyo objetivo no es vender libros, sino ir lloriqueando al gobierno en plan "hacemos lo que podemos, pero mira, en lugar de comprar descargan ilegalmente". Es patético.
Y El País haciendo su trabajo, mutilando la parte que no le gusta de un texto por oh, problemas de espacio.
#6:
Todo esto me hace gracia porque siempre he oído a la gente decir que el problema que había en España con la lectura no tenía nada que ver con el precio de los libros, que en realidad eran muy baratos, que la gente no quería leer, que hay bibliotecas y la gente aún así no lee, etc. Ahora salen con que la gente lo que no quiere es pagar y ha cambiado el discurso de cabo a rabo.
En la edición de El País de hoy se publica un artículo que he escrito sobre el tema de las descargas de libros no autorizadas (que los interesados insisten en llamar “piratería”): Malas y buenas noticias.
Lamentablemente, las presiones del espacio han hecho suprimir una frase, que contenía las “buenas noticias”. Reproduzco aquí el último párrafo, cuya primera parte es la que desapareció:
La situación actual, plagada de descargas no autorizadas, tiene un aspecto positivo: ¡existe la demanda!, ¡hay gente a la que le encanta leer!, ¡en pantalla se puede leer tanto o más que en papel! ¿No será que fallan las alternativas de negocio? Cada vez que hay nuevos cálculos del acceso a obras sin autorización se habla de la “merma de negocio”, y no es así (como ya se ha visto repetidamente en el caso de la música): no toda obra descargada ilegalmente habría sido comprada, y menos a esos precios…
#4 Eso de que "lamentablemente, las presiones del espacio han hecho suprimir una frase, que contenía las “buenas noticias”" es un brillante eufemismo por parte del autor del blog Saludos
#16 Puede no ser un eufemismo. Más bien suena a que el autor del blog manda su colaboración al periódico; alguien allí (no parece que haya sido él mismo) decide "aligerar" el artículo aduciendo razones de espacio. Y suprimen una frase que al autor le parece relevante. De ahí que publique la fe de erratas en su blog.
Más bien parece una forma de no poner a parir el periódic por alterar su texto. Si no, ¿qué sentido tiene que publique la matización?
Las editoriales van a seguir el guión de las discográficas punto por punto. Primero no fue un problema porque en España no había ebooks. Cuando la gente empezó a comprarlos en masa por Internet crearon la peste esa de Libranda, cuyo objetivo no es vender libros, sino ir lloriqueando al gobierno en plan "hacemos lo que podemos, pero mira, en lugar de comprar descargan ilegalmente". Es patético.
Y El País haciendo su trabajo, mutilando la parte que no le gusta de un texto por oh, problemas de espacio.
Todo esto me hace gracia porque siempre he oído a la gente decir que el problema que había en España con la lectura no tenía nada que ver con el precio de los libros, que en realidad eran muy baratos, que la gente no quería leer, que hay bibliotecas y la gente aún así no lee, etc. Ahora salen con que la gente lo que no quiere es pagar y ha cambiado el discurso de cabo a rabo.
Sólo si el e-book nace cerrado y a buenos precios como el caso del kindle (que aporta buen precio, contenidos y buena tecnología) podrán subsistir con un modelo de negocio muy similar al actual, pero teniendo en cuenta que los menores costes de distribución y publicación que ofrece el ebook deberán repercutirlos al cliente en menor precio.
(En España- para variar - esto todavía no lo han entendido)
Totalmente de acuerdo con la opinión de Millán. Lo que falta son iniciativas empresariales para una demanda y un mercado activo y ya existente, pero es que las editoriales están muertas de miedo y no saben por dónde salir.
Volverá a pasar con las películas y discos. La demanda de libros electrónicos va en aumento, pero las empresas editoriales no saben ver el negocio, al menos aquí en España, donde el libro electrónico tiene un precio casi igual al físico, que a todas luces es más caro de producir. Al final, la gente, que no querrá ser timada, accederá a esos libros mediante canales "no autorizados", aunque con la ventaja frente a las películas y la música de que esta vez los archivos son mucho más pequeños. Si a eso le añades que te pasan los archivos con DRM y similares, tienes el resultado. Lo mejor para todos (menos para las editoriales) es que los autores cuelguen su bibliografía en internet a un precio muy bajo o precio libre, ya que al ahorrarse el intermediario, su cuota es mayor, con lo que nosotros pagaremos a gusto sabiendo que el dinero va al artista y no al ladrón.
Otra curiosidad con respecto al mercado de libros electrónicos: es casi imposible comprar libros en otros idiomas. Me gusta leer algo en inglés de vez en cuando para refrescar el idioma; pues bien, las tiendas españolas no ofrecen libros en versión original, y las inglesas o estadounidenses no venden libros electrónicos fuera de su país (pero sí los de papel). Luego, o compro en papel más caro incluyendo gastos de envío, o...
Yo creo que está claro. Los editores han considerado las distintas opciones de negocio y han decidido vivir de las subvenciones y los impuestos privados. Si a los editores musicales les ha funcionado ¿por qué a ellos no?
Una película necesita una enorme financiación previa, pasta que adelanta el productor.
Un disco también necesita cierta infraestructura que hay que pagar antes de empezar a generar beneficios.
Pero, ¿un libro?. Cuidadín editores de libros: el día que los autores tomen conciencia de que no os necesitan (gracias a internet) sobrareis. Bueno quizá no del todo, vuestro negocio quedará relegado a hacer cortas tiradas en papel para el mercado coleccionista y nostálgico.
Es un prolema inherente a la filosoía del empresario español. Tienen a los polítios en el bote y les sale mucho más a cuenta generar un negocio malo que uno bueno porque saben que el gobierno les va a financiar.
Acabo de comprarme un Kindle y la oferta de libros disponible asusta. También tengo un iPad, pero la iBooks no vende en España. También tengo una cuenta americana de Apple y la tienda online es muy buena, aunque no llega al nivel de Amazon.
Si haces un viaje largo y prevees que puedes cambiar varias veces de lecturas, tienes que andar cargando con varios libros, que ocupan espacio, pesan, etc.. De esta forma, podemos tener chorrocientos libros (los que quepan en la memoria) en un mínimo espacio y peso. Yo no se todavía que ven de malo en ello.
Comentarios
Del blog del autor del artículo: http://jamillan.com/librosybitios/2010/11/malas-y-buenas-noticias/
En la edición de El País de hoy se publica un artículo que he escrito sobre el tema de las descargas de libros no autorizadas (que los interesados insisten en llamar “piratería”): Malas y buenas noticias.
Lamentablemente, las presiones del espacio han hecho suprimir una frase, que contenía las “buenas noticias”. Reproduzco aquí el último párrafo, cuya primera parte es la que desapareció:
La situación actual, plagada de descargas no autorizadas, tiene un aspecto positivo: ¡existe la demanda!, ¡hay gente a la que le encanta leer!, ¡en pantalla se puede leer tanto o más que en papel! ¿No será que fallan las alternativas de negocio? Cada vez que hay nuevos cálculos del acceso a obras sin autorización se habla de la “merma de negocio”, y no es así (como ya se ha visto repetidamente en el caso de la música): no toda obra descargada ilegalmente habría sido comprada, y menos a esos precios…
#4 ¿No autorizadas? ¿Es que hay algo que autorizar? Tenemos derecho a copia privada.
#4 Eso de que "lamentablemente, las presiones del espacio han hecho suprimir una frase, que contenía las “buenas noticias”" es un brillante eufemismo por parte del autor del blog Saludos
#16 Puede no ser un eufemismo. Más bien suena a que el autor del blog manda su colaboración al periódico; alguien allí (no parece que haya sido él mismo) decide "aligerar" el artículo aduciendo razones de espacio. Y suprimen una frase que al autor le parece relevante. De ahí que publique la fe de erratas en su blog.
Más bien parece una forma de no poner a parir el periódic por alterar su texto. Si no, ¿qué sentido tiene que publique la matización?
Las editoriales van a seguir el guión de las discográficas punto por punto. Primero no fue un problema porque en España no había ebooks. Cuando la gente empezó a comprarlos en masa por Internet crearon la peste esa de Libranda, cuyo objetivo no es vender libros, sino ir lloriqueando al gobierno en plan "hacemos lo que podemos, pero mira, en lugar de comprar descargan ilegalmente". Es patético.
Y El País haciendo su trabajo, mutilando la parte que no le gusta de un texto por oh, problemas de espacio.
Todo esto me hace gracia porque siempre he oído a la gente decir que el problema que había en España con la lectura no tenía nada que ver con el precio de los libros, que en realidad eran muy baratos, que la gente no quería leer, que hay bibliotecas y la gente aún así no lee, etc. Ahora salen con que la gente lo que no quiere es pagar y ha cambiado el discurso de cabo a rabo.
Sólo si el e-book nace cerrado y a buenos precios como el caso del kindle (que aporta buen precio, contenidos y buena tecnología) podrán subsistir con un modelo de negocio muy similar al actual, pero teniendo en cuenta que los menores costes de distribución y publicación que ofrece el ebook deberán repercutirlos al cliente en menor precio.
(En España- para variar - esto todavía no lo han entendido)
Totalmente de acuerdo con la opinión de Millán. Lo que falta son iniciativas empresariales para una demanda y un mercado activo y ya existente, pero es que las editoriales están muertas de miedo y no saben por dónde salir.
Volverá a pasar con las películas y discos. La demanda de libros electrónicos va en aumento, pero las empresas editoriales no saben ver el negocio, al menos aquí en España, donde el libro electrónico tiene un precio casi igual al físico, que a todas luces es más caro de producir. Al final, la gente, que no querrá ser timada, accederá a esos libros mediante canales "no autorizados", aunque con la ventaja frente a las películas y la música de que esta vez los archivos son mucho más pequeños. Si a eso le añades que te pasan los archivos con DRM y similares, tienes el resultado. Lo mejor para todos (menos para las editoriales) es que los autores cuelguen su bibliografía en internet a un precio muy bajo o precio libre, ya que al ahorrarse el intermediario, su cuota es mayor, con lo que nosotros pagaremos a gusto sabiendo que el dinero va al artista y no al ladrón.
Relacionada: Repitiendo equivocaciones: un error de libro
Repitiendo equivocaciones: un error de libro
enriquedans.comOtra curiosidad con respecto al mercado de libros electrónicos: es casi imposible comprar libros en otros idiomas. Me gusta leer algo en inglés de vez en cuando para refrescar el idioma; pues bien, las tiendas españolas no ofrecen libros en versión original, y las inglesas o estadounidenses no venden libros electrónicos fuera de su país (pero sí los de papel). Luego, o compro en papel más caro incluyendo gastos de envío, o...
#11 Eso puede deberse a problemas con los derechos de autor en los distintos países e idiomas.
#17 Lo que me llama la atención es que el problema es con la versión electrónica, la de papel la puedo comprar sin problema.
#19 teniendo en cuenta que en el terreno electrónico las fronteras se difuminan, la gestión y cobro de los derechos se complica mucho.
Yo creo que está claro. Los editores han considerado las distintas opciones de negocio y han decidido vivir de las subvenciones y los impuestos privados. Si a los editores musicales les ha funcionado ¿por qué a ellos no?
Además, trabajar cansa.
Una película necesita una enorme financiación previa, pasta que adelanta el productor.
Un disco también necesita cierta infraestructura que hay que pagar antes de empezar a generar beneficios.
Pero, ¿un libro?. Cuidadín editores de libros: el día que los autores tomen conciencia de que no os necesitan (gracias a internet) sobrareis. Bueno quizá no del todo, vuestro negocio quedará relegado a hacer cortas tiradas en papel para el mercado coleccionista y nostálgico.
El modelo de negocio está en vender el dispositivo cerrado con tarifa plana "all you can read"
Mis obras tambien se pueden leer en libro electrónico, faltaba más...
Es un prolema inherente a la filosoía del empresario español. Tienen a los polítios en el bote y les sale mucho más a cuenta generar un negocio malo que uno bueno porque saben que el gobierno les va a financiar.
Acabo de comprarme un Kindle y la oferta de libros disponible asusta. También tengo un iPad, pero la iBooks no vende en España. También tengo una cuenta americana de Apple y la tienda online es muy buena, aunque no llega al nivel de Amazon.
Sigue exisitendo el problema de que algunos libros sean más caros en formato electrónico que en papel. Da igual, se nivelará solo cuando haya demanda. El problema de España es que la demanda nunca existirá porque nunca habrá suficiente gente comprando en los librandas y compañía. Al finalgallir tendrá razón http://gallir.wordpress.com/2010/11/03/tabletas-y-la-falacia-narrativa-perfecta/ y http://gallir.wordpress.com/2010/07/16/no-seamos-incautos-libranda-no-pretende-vender-ebooks/
España es un micromundo de chorizos y así nos va. Relacionada ¡Pero qué productividad ni qué productividad!
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cotizalia.comLa buena noticia sería que el que quiere algo, lo paga y lo usa.
Fuera de eso, cánticos celestiales.
#15 Lo pagamos, se llama canon digital.
Si haces un viaje largo y prevees que puedes cambiar varias veces de lecturas, tienes que andar cargando con varios libros, que ocupan espacio, pesan, etc.. De esta forma, podemos tener chorrocientos libros (los que quepan en la memoria) en un mínimo espacio y peso. Yo no se todavía que ven de malo en ello.