Soy progresista como el que más, y creo que el mecanismo constitucional para cambiar las cosas es el más ventajoso para mis ideas. No estoy en contra de exigir un referéndum porque es una forma de agitar el debate por medio de una idea poderosa (¡la democracia!), pero me parece bien que no se pueda realizar, porque la monarquía ayuda al progresismo. De modo que SI al referéndum, pero ni se os ocurra hacerlo! porque puede ser fatal, ya que en una de esas lo gana la monarquía a poco que nacionalistas de aquí y de allá vuelvan a agitarse y logren quitarle el protagonismo mediático al virus. Si se resuelve lo del virus quizá no tengamos otra excusa que evite llenar las "noticias" con los "provechosos" y "originales" y "entretenidos" y "emocionantes" dimes y diretes de los nacionalistas. Los últimos años, antes del virus, los nacionalismos eran el monotema de los grandes medios que alcanzan a las clases populares, el resultado: tres millones y pico de votos para el feudalismo y la monarquía. Mientras los nacionalismos estén haciendo lio evitar un referéndum sobre este tema es lo mejor para el progresismo.
Hace siglos que nadie defiende al rey desde principios morales y políticos bien fundamentados, tan sólo se hace mediante buenismos ingenuos, retratos sentimentales y pragmatismos insustanciales que podrían aplicarse a cualquier hijo de vecino: "es campechano", "hacen poco gasto", "esta preparao", "buen diplomático", etc. Además los monárquicos están shockeados desde que el rey se cargó al elefante #1 y ya con el affaire de Corinna y los gritones de euros de los saudíes es una pena verlos defender a la monarquía, no por lo que defienden (que también) si no porque en sus discursos han perdido la ética, la sustancia y el espíritu que les quedaba con el juancarlismo. Pero no van a permitir un referéndum. Aunque tampoco van a hacer un relato que pueda apuntalar al rey. Por supuesto se intentarán refritos populistas que, cuando eres incapaz de controlar crisis que no son ficticias y tienes en Youtube menos seguidores que El Rubius, no se van a escuchar tanto ni de la misma manera que hace cuarenta años.
Los que sostienen a la monarquía, y podrían torcer un referéndum, no son los nostálgicos que aun intentan pobres argumentos y son vapuleados en sitios como este todos los días si no los consumidores ágrafos de las telecircos y revistas de la farándula que mantienen contenido dedicado a personajes de la aristocracia y la realeza. Las marujas de mediana edad que "no se meten en política", sostienen al rey a base de gritos y aplausos, pero las nuevas generaciones están siguiendo a otro tipo de reyes y reinas. No es que la gente sea menos conservadora, no en un mundo en el que emerge el feudalismo, el terraplanismo, el creacionismo y los antivacunas, es que van dejando de seguir los relatos telecircenses de reyes y princesas. Tampoco es que nos hayamos vuelto demócratas, lo que pasa es que es imposible hoy en día hacer que millones de cerebros de una nación se enfoquen en la vida y milagros de los personajes de la antigua casta. Y de ese modo es impracticable el cultivar en esos millones de cerebros el relato que nos decía que los reyes mantienen el régimen o la integridad de España.
Mientras teníamos dos canales de televisión, cuatro de radio y un número parecido de revistas de papel couche en las peluquerías, las figuras de aristócratas y reyes funcionaban bien con algunas decenas de folclóricas y artistas "de moda" que les encajaba la industria del pop, sin embargo en el mundo de internet y las redes sociales la atención de la gente se dispersa entre miles de otros recién llegados igual de frívolos si, pero más espabilados y ocurrentes, y también entre otros muchos con un bagaje intelectual mayor ¿O acaso podéis comparar lo que nos cuenta Jaime Altozano con lo que, de uvas a peras, nos dice Felipe VI? (en cuanto a la calidad del medio y el contenido, aunque traten temas distintos) Quizá podríais compararlos si alguna vez hubierais escuchado un discurso de Felipe VI, entero... La monarquía esta pasando a formar parte del interés de los frikis, y en un par de décadas será cosa de cuatro frikis. Su abolición sera una baza electoral para los partidos que la propongan, lo que será bueno para los progresistas, porque en España ningún partido de derechas va a aprovechar esa oportunidad.