En un punto de las praderas de Kansas, en EE. UU., un empresario construye bajo tierra un ostentoso búnker donde varias decenas de ricos podrán nadar en la piscina o ver películas mientras la Tierra sucumbre bajo el efecto de catástrofes apocalípticas o la amenaza de los zombis. Lo que en su día fue un silo de 53 metros de profundidad, pronto se convertirá en un hotel blindado, armado y lujosamente equipado para quienes prefieren no pasar el día del Juicio Final expuestos a todo tipo de cataclismos en la superficie del planeta.
Comentarios
Mi casa, mi búnker
Mi casa, mi búnker
abc.esPues mira, que aprovechen para echar cemento en la puerta y dejar que se pudran dentro.
si, taponar la puerta no es mala opción, y la mejor si hubiera dentro una reunión de la Troika, con Uribe, la Merkel y todos los ex de Goldman Sachs
A pico y pala ponia yo a estos olganzanes
#0 ¿Política?
Me lo has quitado de los dedos. UNA PALA Y UNA ESPIOCHA TE DABA YO ¡¡¡¡