El lenguaje de la corrupción varía de un país a otro, pero hay similitudes. David Henig, de la Universidad de Kent y Nicolette Makovicky, de la Universidad de Oxford, lo ilustran con los siguientes ejemplos. La frase "el pez empieza a apestar por la cabeza" proviene de Turquía y nos recuerda que los pequeños sobornos a nivel de calle van, en general, acompañados de una mayor corrupción en las cúpulas de las organizaciones e instituciones. Y como se dice en Rusia, "las 'gracias' no entran en el bolsillo". ("spasibo v karman ne polozhish").
Comentarios
Muchos eufemismos de la corrupción y el soborno buscan minimizar su importancia. La expresión swahili "kitu kidogo" (algo pequeño) es un buen ejemplo.
Vaya, sabía que esa canción que mandamos a Eurorrisión hace unos años podía ser malinterpretada, ¡pero no de esa manera!
En España tenemos los verbos untar y enchufar.
Algo pequeñito