Aunque la pequeña Guyana, en comparación con los países industrializados, tiene una responsabilidad mínima en la contaminación planetaria, el acuerdo la obliga a acelerar sus esfuerzos por limitar las emisiones de gases invernadero y también a proteger sus reservas forestales, en gran medida intactas. La puesta en marcha de este plan de atracción de fondos externos llevó a las autoridades a aumentar las regulaciones a industrias como la minería de oro y diamantes, así como el sector maderero, dos de las principales fuentes de divisas del país.
|
etiquetas: guyana , medioambiente , amazonía , conservacionismo , economía , minería