Después de un año preparando el proyecto e investigando sobre las posibilidades de pedir comida a domicilio a través de la web, La Nevera Roja salió a la luz. "Vimos una gran oportunidad ya que quienes empiezan a pedir comida a domicilio por Internet, no vuelven a usar el teléfono", explica José del Barrio, CEO y cofundador de La Nevera Roja.
Debido a mi precariedad, antes llamaba por teléfono para pedir comida a los vecinos. Ahora pido a través de mi cuenta de Twitter y me va bien. Claro, que con ello tengo dinero para Twitter pero no para comida.
#2: Exacto. Y, además, a mí me ocurre que me gusta mucho más configurarme yo el pedido que dictárselo al teleoperador de turno, pues así lo curso a mi ritmo (pensándomelo todo las 550 veces de rigor ), sin ninguna prisa, con toda la información de promociones y la carta completa del establecimiento perfectamente a mano, y pudiendo cancelarlo en cualquier momento si finalmente me arrepiento.
Y sin pedir comida también lo dejas de usar. En cuanto todo el mundo esté conectado por redes de mensajería no vuelves a molestar a nadie con llamadas. Les mandas un mensaje y ya contestarán cuando puedan o quieran. Evitas molestias y costes.
Comentarios
Debido a mi precariedad, antes llamaba por teléfono para pedir comida a los vecinos. Ahora pido a través de mi cuenta de Twitter y me va bien. Claro, que con ello tengo dinero para Twitter pero no para comida.
Básicamente porque por internet me suelo beneficiar de promociones y/o descuentos que no aplican por teléfono
#2: Exacto. Y, además, a mí me ocurre que me gusta mucho más configurarme yo el pedido que dictárselo al teleoperador de turno, pues así lo curso a mi ritmo (pensándomelo todo las 550 veces de rigor ), sin ninguna prisa, con toda la información de promociones y la carta completa del establecimiento perfectamente a mano, y pudiendo cancelarlo en cualquier momento si finalmente me arrepiento.
Por teléfono no es igual, no.
#3 "pensándomelo todo las 550 veces de rigor": y así es como terminas cenando lo que querías comer
Y sin pedir comida también lo dejas de usar. En cuanto todo el mundo esté conectado por redes de mensajería no vuelves a molestar a nadie con llamadas. Les mandas un mensaje y ya contestarán cuando puedan o quieran. Evitas molestias y costes.