Strauss-Kahn ha llegado a la sede del FMI en compañía de su mujer, la periodista francesa Anne Sinclair, conduciendo su propio coche. Una vez allí, ha mantenido una breve reunión con su sucesora en el cargo, Christine Lagarde, sin que haya trascendido ningún detalle.
El FMI, la cueva de Ali Baba y los cuarenta ladrones. Sus disculpas son pura hipocresía, con los colegas ricos y de su calaña son complacientes, con los pobres duros y crueles.
Comentarios
Está claro... Hoy por ti y mañana por mi...Que vergüenza.
El FMI, la cueva de Ali Baba y los cuarenta ladrones. Sus disculpas son pura hipocresía, con los colegas ricos y de su calaña son complacientes, con los pobres duros y crueles.
Dicen que la justicia es ciega... pero joder, no sabía que tanto!!!!!!
Violadores... antes se escodían y ahora hacen alarde.
Cuando eres rico y/o poderoso no llegas ni a juicio.