(C&P) Por un puro juicio de intenciones tarifadas por ese adefesio jurídico que es la llamada Ley de Partidos, a un sector activo de aquel pueblo se le niega el “sagrado” derecho de sufragio. El Estado español les quiere como contribuyentes pero les niega sus derechos políticos y civiles más esenciales.
|
etiquetas: tribunal , supremo , fomenta , separatismo , rafael , cid , ley de partidos