Los chicos que afirmaron que su distribuidor oficial era Internet (Nuestra discográfica es MegaUpload) vuelven a la carga y esta vez se meten a estudio por sus propios medios. Punzante crítica al sistema actual de venta, marketing, promoción en la música. Un futuro negro pero sin miedo al fracaso. Sin ambajes. El ejemplo práctico de como el trabajo de cinco chicos sube como la espuma en el verdadero medio del siglo XXI: Internet.
Comentarios
¿Qué cojones tendrá que ver la calidad de un disco con su manera de distribuirse?
Los de las discográficas no eran buenos y los de Creative Commons... pues tampoco.
Vacios, típico grupo modernete, con mucho aspaviento y mucha pose para intentar tapar la vacuidad de su propuesta.
O dicho de otra forma, malos malos.
Nada que ver, pero el títular de la noticia no deja de ser impactante, de ahí que pinchara la noticia.
Al menos a mí me ha funcionado! Saludos