#122Exacto, racionalmente hablando las familias del franquismo tenían mejor acceso a vivienda,
Ya, "racionalmente". Ese es el cuento que te han contado y que tú vienes a repetir aquí, a ver si cuela.
Te recomiendo que veas la película "El inquilino", dirigida en el año 1957 por el falangista José Antonio Nieves Conde. Y luego, ves la de "El pisito", del 58, que vuelve a la misma problemática del acceso a la vivienda como tema central:
#5 ¿Te refieres a cuentas como la de #3, sin comentarios desde hace décadas, que "resucitan" de golpe para comentar frenéticamente en contra del Gobierno y de todo lo que huela mínimamente a izquierda?
PD: Atención al cambio de tono del "Empleado Extranjero" (sic) en el comentario de septiembre de este año.
Pues claro. Cuando vienes de la miseria y de una economía de posguerra de mierda, es mucho más fácil subir de forma espectacular, a poco que hagas las cosas medio bien.
Es lo mismo que ocurre cuando una persona que nunca ha movido un músculo empieza a hacer deporte; las mejoras en su rendimiento son bestiales en comparación con otra persona que lleva toda la vida haciendo ejercicio.
Se llama regresión a la media. Has descubierto la sopa de ajo.
A pesar de todas las limitaciones técnicas y la censura política de la época, era capaz de crear un capítulo tan adelantado a su tiempo como este, digno de Black Mirror (salvando las distancias).
#4 Menudo nivel... En la noticia que enlazas hay algunos comentarios tan esperpénticos, que no sé si están troleando, o es que de verdad son así de lerdos.
"Que sí, si esto está muy bien... pero el problema es que la izquierda no hace autocrítica y por eso la gente vota a la derecha" (la misma derecha que no ha votado a favor de esta medida, ni la votaría jamás).
#4 Lo de las cuentas antiguas que "resucitan", tras 10 o 15 años de inactividad, para atizar a la izquierda con chorrocientos comentarios al día... Joder, es que canta a leguas.
#4 Bertrand Russell afirmó que, desde el Concilio de Trento hasta la actualidad, todos los avances en la Iglesia se debían a sus enemigos. Y es la puta verdad.
Pues exactamente lo mismo se puede aplicar al capitalismo (que la llamada "época dorada" del capitalismo coincida con la Guerra fría y la amenaza latente de la URSS debería darnos una pista).