#36 Y cual es el problema. A mi me parece perfecto este gasto, para nada superfluo y muy humanitario. Y por lo que veo en las calles, hay muchos conciudadanos que también están a favor.
#118 es para #_73 Vas a comparar decirle a un gilipollas (nazi y negro) que no te toque con desatender tus funciones en la DANA mientras mueren ahogadas mas de 200 personas.
Creo que al puente deberían colgarlo de las pelotas en la plaza mayor y a Mazón darle una medallita, a poder ser de la Mare de Déu dels Desemparats, para que no vuelva a llover tanto mientras esta dando la jefatura de a punt, a la jamba que se esta zumbando entre tirito y tirito del amigo de Feijoo.
#41 Oye, que siempre puedes hacer tu el paripé para salvar a los habitantes de Pakistán, Uganda, Chad, Brasil, Yemen, Kurdistán... que sufren dichas tragedias. Seguro que nadie te dice nada. Salvo algún subhumano que critica a quien se preocupa por un grupo de personas y no por todas las posibles.
Te apoyare al 100%
#15es.wikipedia.org/wiki/Euskadi_Ta_Askatasuna
Euskadi Ta Askatasuna (ETA; «País Vasco y Libertad» en euskera) fue una organización terrorista[nota 4] nacionalista vasca que se proclamaba independentista, abertzale, socialista y revolucionaria. Durante sus sesenta años de historia, entre 1958 y 2018
#159 Para el capitalista dogmático, el mercado es una deidad incuestionable: un ente abstracto e infalible cuyos designios, supuestamente perfectos, debemos aceptar con fe ciega. Es una postura más cercana a la religión que al análisis económico.
El Estado, efectivamente, provee la infraestructura esencial para la generación de riqueza: seguridad, educación, sanidad y obras públicas. Sin embargo, si el fruto de esa riqueza colectivamente facilitada no se redistribuye, se genera una contradicción insostenible: una sociedad que trabaja en conjunto para crear prosperidad, pero que no se beneficia de ella de manera conjunta. Cuando la desigualdad crece y cada vez más familias no logran salir adelante a sus familias... es cuando surgen los movimientos de ruptura. La historia nos muestra, una y otra vez, que cuando los canales de la justicia y la distribución se cierran, la sociedad busca desesperadamente otros, a menudo convulsos. No es una amenaza, es una lección de la historia que sería imprudente ignorar.
En definitiva, la lógica es tan simple como irrefutable: hay que promover la generación de riqueza, y, con la misma determinación, garantizar su distribución. No son objetivos opuestos, sino las dos caras de una economía sana y una sociedad estable.
#67 digo yo que entre la visión extrema del comunismo de 800 dólares y la extremista en la que vivimos de conseguir esas fortunas indecentes hay un puto termino medio.