La defenestración del consejero delegado de Danone por parte de los accionistas refuerza las dudas sobre el supuesto compromiso medioambiental y social de las grandes compañías plasmado en la declaración de la Business Roundtable en verano de 2019. Entonces, los 181 presidentes ejecutivos de las mayores corporaciones de EEUU proponían un cambio radical para que el objetivo único de las compañías dejara de ser la maximización de beneficios. Hoy, menos de dos años después, el activismo de los accionistas ha diluido las buenas intenciones.
Comentarios
Así que la noticia es que Faber tenía algo de conciencia y los otros no le explicaron que lo de la BRT era mera publicidad para quedar bien pero que lo importante seguía siendo el dinero. Lo que vuelve a ratificar que la única forma de que las compañías hagan algo más allá de enriquecer a sus propietarios es poner regulaciones que les obliguen, pero eso les da urticaria a los liberales.
Las empresas que más basura plástica generan;
Sorpresa!!
¿Pedir compromiso a la mayores sanguijuelas?
Después nos llaman utópicos a los rojos. Si es que...
La ambición de unos pocos se hace con el poder, se compran voluntades y votos con promesas y dinero, no faltará quien venda a su madre por un porcentaje y así lo que parece democracia solo es dinero y poder
Danone obtuvo un beneficio neto de 1.956 millones de euros en 2020, con un ligero aumento del 1,4% respecto al ejercicio anterior. ¿No son suficientes 1.956 millones de beneficios suficientes para felicitar a Faber cuando ese año hizo la mayor inversión en la historia del grupo para reducir el uso de plásticos? Para los fondos de inversión Bluebell Capital y Artisan Partners no solo no ha sido suficiente sino que fue el detonante para organizar una revuelta accionarial que ha acabado con el despido del directivo. El argumento de estos accionistas es que el rendimiento de la compañía está por detrás de un competidor directo como Nestle, que también están dando pasos para mejorar su huella medioambiental.
Yogures La Fageda
La noticia es bastante simplista y, sobre todo, asume motivos gratuitamente.
La destitución de un consejero delegado puede realizarse por un millón de razones. Por ejemplo, porque la empresa tiene grandes beneficios pero a mí no me has dado el bono que pensaba que me ibas a dar. O rencillas personales. O meter a otro que creo que lo haría aún mejor.
Yo
Incluso, la empresa puede tener grandes pérdidas y mantener al ceo sin su puesto por otros motivos, como le pasó a amazon que quizás sea el ejemplo más famoso.
Yo he visto cerrar una oficina de una empresa, con sus veintimuchos trabajadores, despidiendo por el camino a tres miembros del Consejo de administración, "porque creo que la oficina debería estar en otra ciudad". Tal cual.
No voy a negar que quizás tenga razón en algunos de los casos que exponen, o en todos, pero me parece un tiro al aire simplista y arriesgado.
Buenos propósitos de la codicia, si si.
¿Buenos propósitos y capitalismo en la misma frase?. No se rick, suena a oxímoron.