Un día como cualquier otro, el camionero japonés Toshifumi Fujimoto, divorciado y con tres hijas que no le dirigen la palabra, se aburrió definitivamente: cansado de transportar cisternas de Osaka a Tokio cada jornada, decidió que necesitaba adrenalina. A sus 45 años barajó el puenting y la caza de tiburones. Sin embargo, acabó yéndose a la guerra de Siria.
Interesante reflexionar sobre la ética de este "turismo" como dice el artículo:
"Estos viajes se realizan en lugares donde hay gente que sufre, ¿no es una forma de banalizar realidades duras por parte de quienes pueden apartarse de ella a golpe de avión? ¿No convierte, más si cabe, el sufrimiento humano en un espectáculo salvaje? Según Philip Stone, los turistas oscuros son personas interesadas en el mundo que les rodea: "Tú y yo somos turistas oscuros cuando visitamos la Zona Cero" "
Si este hombre asume sus riesgos, no problem!! ahora que la historia de este hombre quieran relacionarla a un turismo de moda porque no hay más noticias.
Comentarios
Interesante reflexionar sobre la ética de este "turismo" como dice el artículo:
"Estos viajes se realizan en lugares donde hay gente que sufre, ¿no es una forma de banalizar realidades duras por parte de quienes pueden apartarse de ella a golpe de avión? ¿No convierte, más si cabe, el sufrimiento humano en un espectáculo salvaje? Según Philip Stone, los turistas oscuros son personas interesadas en el mundo que les rodea: "Tú y yo somos turistas oscuros cuando visitamos la Zona Cero" "
Lo malo que es el aburrimiento. El ser humano nunca dejará de sorprenderme ...
Si este hombre asume sus riesgos, no problem!! ahora que la historia de este hombre quieran relacionarla a un turismo de moda porque no hay más noticias.
Pues la verdad el hombre parece disfrutarlo...
Este japonés es de los que se apuntan a un bombardeo!