Debido a sus altos niveles de polución (33 de las 50 ciudades más contaminadas de Europa están aquí), a Polonia se le llama la “China de Europa”. Pero, desde enero, ya ni siquiera China acepta importar basura occidental para reciclarla. En la mayoría de los países desarrollados, como el Reino Unido, deshacerse de residuos plásticos es caro y está regulado, pero no en Polonia, donde no hay un precio mínimo y los contratos van a parar al mejor postor.
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y eso sin contar su principal veneno: el polonio.
Los de su ideario son más de trasladar los medidores de sitio, antes de tomar medidas perroflauticas.
Polonia es el país peor gobernado de Europa.