Diego García Arias, uno de los principales exdirectivos de Inassa (la filial del Canal de Isabel II en Sudamérica) investigado por pagar y recibir mordidas, ha decidido reclamar a la Comunidad de Madrid 300.000 dólares (250.000 euros) por lo que él considera un despido improcedente. Alega que tenía un contrato blindado que le habilitaba a cobrar esa cantidad si Inassa decidía prescindir de sus servicios sin causa justificada. García Arias ha reconocido que se llevó 900.000 dólares en la operación en que también cobró Ignacio González.
Comentarios
Pero esta gente no defiende el despido libre? Que les jodan anda.
#2 Lo defienden para los demás, cuando les afecta a ellos a llorar.
#3 Todo coherencia neoliberal
Alega que tenía un contrato blindado que le habilitaba a cobrar esa cantidad si Inassa decidía prescindir de sus servicios sin causa justificada.García Arias ha reconocido que se llevó 900.000 dólares en la operación en que también cobró Ignacio González.
A mí me parece una causa justificada
Hombre, si se llevo pasta creo que su despido esta justificado, aunque el contrato diga misa.
Ya puede pedir, que espero no se le de nada.
Nunca dudéis de la absoluta falta de moral y del tamaño de la basura ética de gente como este cabrón y sus colegas neoliberales. No tienen ningún problema en aparecer como psicópatas insaciables. Muchos de hacen ricos así, llevando al límite exigencias inadmisibles, como nuestro maldito Florentino Pérez.
Espero que les reviente el hígado.