El ya dimitido secretario general del PSOE heredó un partido desacreditado por las medidas sociales del zapaterismo en sus últimos años de gobierno; descrédito que la dirección de un político ligado a los objetivos de estabilidad del capitalismo como Rubalcaba no logró hacer olvidar, a pesar de los primeros años de gobierno de Rajoy. La llegada de Pedro Sánchez, un oscuro concejal en legislaturas anteriores del Ayuntamiento de Madrid y un no más brillante diputado del PSOE en el Congreso, a la secretaría general de este partido no auguraba
Comentarios
Lo que descubre es la pantomima de las primarias (otra vez) un abrazo Borrell
. La castuza deja hacer mientras no les amenaces el chiringuito, pero como hagas el menor movimiento fuera de lo "normal" entonces intervienen y dan un golpe de mano. El PSOE no tiene remedio.
#6 Los comunistas siempre teneis un tufillo elitista flipante, pero mola ver como os mosqueais cuando os lo dicen
#7 Claro, donde esté el aroma del obrero de derechas...
#8 No te equivoques. Los marxistas, como estúpidos hegelianos, creeis que todo aquel que no sea comunista es de derechas, pero un anti-anti-marxista no es un marxista.
No lloreis tanto cuando no podeis comerle la cabeza a la gente, pobres estalos sin gulag
¿Se conoce cuàntos acuden a las reuniones de este Encuentro Comunista?
4 gatos y un par de ratas me parece.
#4 Esos gatos y esas ratas son más decentes que ciertos 7.8 millones de electores.