Más que compartir gustos, lo que une es compartir odios. Y eso lo saben bien los partidos políticos, que basan cada vez más sus campañas en la gestión de los odios del electorado. Un ejemplo es el PP valenciano, que durante años exprimió el anticatalanismo de la región para amasar votos. O el antiespañolismo de CIU, azuzado cuando el partido comenzaba a perder adeptos. Porque… ¡nada une más que un buen enemigo!
Creo que odiar es una palabra muy fuerte como para usarla tan a la ligera. Que una persona no esté de acuerdo con algo no quiere decir que tenga que odiarlo.
De hecho, ese es el discurso extremista que están utilizando muchos, sacar las cosas de madre y crispar lo más posible para que en vez de tender manos hacia el diálogo y el acuerdo, la convivencia entre posturas distintas, sea todo lo contrario.
A mí no me gusta la semana santa y no por eso odio sus símbolos ni a la gente que la disfruta, por poner un ejemplo.
El odio no beneficia a nadie, ni a los que odian ni a los que son odiados.. sólo les viene bien a los que sacan réditos de los enfrentamientos.
Comentarios
#7 Justo. Ha sido cumplir los 40 y empezar a soportar cada vez menos tonterías
#8 Yo soy rebelde porque el mundo me hizo así, porque nadie me ha tratado con amor, porque nadie me ha querido nunca oir
Yo odio a todo el mundo
#6 yo no se si odio a todo el mundo, pero que con la edad la misantropía va en aumento lo tengo claro.
#6 Y todo el mundo te odia a ti.
#6 Es lo normal y correcto en cualquier persona mínimamente honrada y sensible. La gente da por culo.
Odio a los putos gordos, ¿a quíen voy a votar? Dios como los odio con sus michelines y su sudor.
#2 A éste.
https://www.vitonica.com/enfermedades/un-militar-genera-polemica-con-una-revolucion-contra-los-gordos
Creo que odiar es una palabra muy fuerte como para usarla tan a la ligera. Que una persona no esté de acuerdo con algo no quiere decir que tenga que odiarlo.
De hecho, ese es el discurso extremista que están utilizando muchos, sacar las cosas de madre y crispar lo más posible para que en vez de tender manos hacia el diálogo y el acuerdo, la convivencia entre posturas distintas, sea todo lo contrario.
A mí no me gusta la semana santa y no por eso odio sus símbolos ni a la gente que la disfruta, por poner un ejemplo.
El odio no beneficia a nadie, ni a los que odian ni a los que son odiados.. sólo les viene bien a los que sacan réditos de los enfrentamientos.
#5 Rechazo racional informado, lo llamo yo.
Faltan unos cuantos odias en el artículo.
Odias a los ricos?
Odias a los católicos?
Odias las tradiciones?
Que no todo el odio va en una dirección.
#1 Siempre va en la misma dirección, de frente.
Yo odio a los fans turras de Bruce Springsteen
y quien no? Que no sea fan pesado del Bruuussss.
Dime a quién votas y te diré a quién odias.
Yo odio a los fans turras de Bruce Springsteen y a los tíos con chancletas y pantalones pirata. ¿A quien tengo que votar?
Os odio a todos sin distinción; y también odio los pasodobles.
El odio a la Venezuela chavista, eso sí qué une.
Tío Marx está podrio, tío Mao está cagao
Jesucristo está en mi culo y Buda en mi oreja,
Hitler tiene sucesores y nadie los ve
¡Odio a los partidos, fuego a las banderas!
¡Odio a los partidos, fuego a las banderas!
En el nombre de una idea yo no me quiero morir
Pensadores en sillones no me van a dividir
Y tus bonitas banderas a mi espalda quedan
¡Odio a los partidos, fuego a las banderas!
¡Odio a los partidos, fuego a las banderas!