La Agencia de Inteligencia Financiera Australiana entregó a la policía federal del país y a la del estado de Victoria información sobre el presunto envío de cientos de miles de euros de fondos del Vaticano a Australia, a petición del defenestrado cardenal Angelo Becciu, supuestamente para influir en el juicio contra el cardenal George Pell. Pell había sido acusado de abuso sexual en Australia y, aunque debió pasar 13 meses en la cárcel, finalmente fue declarado inocente y liberado en abril de 2020.
Comentarios
#2 «Es más fácil que un camello pase por el ojo de una aguja, que un rico entre en el Reino de los Cielos». Algo que siempre me ha sorprendido de la religión católica es que su doctrina está orientada a los pobres, a los que menos tienen y curiosamente los más acérrimos defensores son los ricos, los que lo tienen todo, los que anteponen el culto al dios antes que cumplir los preceptos de este. Si de verdad eres creyente, no puedes pensar que ciertos defensores de la iglesia, como muchos que conocemos por España, pueden ir al cielo.
Mención a parte merecen los curas que bendecían, pistola al cinto, a los que iban a ser ejecutados en diversas dictaduras, en esos casos ya es que no entiendo si de verdad son creyentes o es una fachada o simplemente algo les funciona mal en la mollera (probablemente esto último)
Todo el mundo tiene derecho a una defensa, y eso cuesta dinero. Por otro lado parece que el dinero no era estrictamente para pagar la defensa, si no para influir. Tampoco es sorprendente dentro de esta organización
#1 Esta claro que el dinero de la iglesia no va a donde tiene que ir, que se supone es para los necesitados y gentes en situaciones extremas.
El andova de la derecha parece hermano de Zapatero.