Mientras Estados Unidos pasa por la fase más mortífera hasta el momento de la pandemia de coronavirus, gobernadores y funcionarios locales en partes muy afectadas del país muestran poca disposición para imponer nuevas restricciones a los negocios para contener la propagación.En Arizona, en donde la pandemia está causando estragos, el gobernador republicano ha sido firme en su oposición al uso obligatorio de mascarilla a nivel estatal o al cierre de bares, gimnasios y restaurantes. Minnesota y Michigan volveran a permitir comer en restaurantes
Comentarios
lo normal cuando tienes psicopatas al mando
Le van a cambiar el nombre a JackUS.
no se, creo yo que ha quedado más que demostrado que al menos en pandemias mortiferas globales quien antepone la economía frente a la salud las pierde ambas.