Desde la investigación y un profundo conocimiento de los sistemas educativos, la experta sueca Inger Enkvist reivindica una mayor exigencia sobre el esfuerzo y sobre el aprendizaje de conocimientos en contra de las tendencias pedagógicas actuales.
#2 tanto como que no sirve para nada... A parte en el artículo sí que habla de voluntad, que puede representar un esfuerzo (la fuerza de voluntad?). La capacidad para esforzarse, a parte, pienso que se puede y debe entrenar. Por poner un ejemplo, cuando empiezas a trabajar al principio te puede costar mucho, porqe has perdido "la costumbre", estás desentrenado.
#5 sí, pero el esfuerzo no es un valor en sí mismo. Si se tratase de matemáticas por ejemplo, nuestro ideal, de todos, es dar con alguien que sea capaz de resolvernos un sistema de ecuaciones diferenciales sin esforzarse nada, como quien jugase al tute
Si somos consecuentes, las mejores notas hay que darlas a quien haga las cosas medianamente bien y sin aparente esfuerzo. Lo de estar esforzándose un montón y trabajando mucho (o pareciendo que se esfuerza, que los niños de tonto no tienen nada) y que luego le suban la nota por ello es premiar una actitud que luego la sociedad no aprecia, encaminar mal al chaval.
Ya que se toca el tema, no hay que dejarlo pasar: es muy importante que en los colegios se aprenda uno a esforzarse. A fuerza de poner el nivel para los más torpes (me rellenas estas hojas de trabajo mecánico y ya os apruebo, no os quejéis, solo con un poco de esfuerzo ya os regalo el aprobado), los que no son tan torpes ven como su educación se reduce a ir aprendiendo a paso lento y esperando a los demás con esfuerzo cero. El día que necesiten esforzarse para algo no van a tener práctica y van a darse cuenta que en la escuela les han tangado, que les han discriminado para darles una preferencia a los que van mal o cerca de mal. La sociedad es muy puñetera según con qué personas.
Cuando un inspector me dice que lo importante no es saber sujeto y predicado, o complemento directo, que de lo que se trata es de que los alumnos estudien bien. Yo me pregunto ¿cómo si no va a entender alguien por qué no son correctos los siguientes enunciados?:
- Han habido tres accidentes este fin de semana.
- El grupo de las niñas salieron por la puerta.
- El marido la disparó (refiriéndonos a su mujer).
Lo importante es comunicarse, me dice, ni la teoría esa que no vale para nada. Y yo no sé cómo llegar a una cosa sin la otra.
Licenciada en filología francesa, empezó a trabajar en la enseñanza primaria, secundaria y media de Suecia como profesora de francés y luego también de inglés; posteriormente hizo su tesis sobre literatura española, doctorándose en Letras por la Universidad de Gotemburgo (Suecia). Tradujo varios autores y publicó estudios sobre Miguel de Unamuno, José Ortega y Gasset, María Zambrano, Fernando Savater, Eugenio Trías, Mario Vargas Llosa y Juan Goytisolo; ha traducido la obra de Mario Vargas Llosa y de Juan Goytisolo y ha organizado el Simposio internacional sobre la obra de Tzvetan Todorov (Lund 2004) y el Simposio Internacional Aprender a Pensar (Universidad de Lund, 2005). En la actualidad ocupa la Cátedra de Español en la Universidad de Lund y es asesora del Ministerio de Educación sueco.
Comentarios
El esfuerzo no sirve para nada. Nunca ha servido.
De lo que habla la profesora Enkvist es de exigencia, que es muy distinto.
#2 tanto como que no sirve para nada... A parte en el artículo sí que habla de voluntad, que puede representar un esfuerzo (la fuerza de voluntad?). La capacidad para esforzarse, a parte, pienso que se puede y debe entrenar. Por poner un ejemplo, cuando empiezas a trabajar al principio te puede costar mucho, porqe has perdido "la costumbre", estás desentrenado.
#5 sí, pero el esfuerzo no es un valor en sí mismo. Si se tratase de matemáticas por ejemplo, nuestro ideal, de todos, es dar con alguien que sea capaz de resolvernos un sistema de ecuaciones diferenciales sin esforzarse nada, como quien jugase al tute
Si somos consecuentes, las mejores notas hay que darlas a quien haga las cosas medianamente bien y sin aparente esfuerzo. Lo de estar esforzándose un montón y trabajando mucho (o pareciendo que se esfuerza, que los niños de tonto no tienen nada) y que luego le suban la nota por ello es premiar una actitud que luego la sociedad no aprecia, encaminar mal al chaval.
Ya que se toca el tema, no hay que dejarlo pasar: es muy importante que en los colegios se aprenda uno a esforzarse. A fuerza de poner el nivel para los más torpes (me rellenas estas hojas de trabajo mecánico y ya os apruebo, no os quejéis, solo con un poco de esfuerzo ya os regalo el aprobado), los que no son tan torpes ven como su educación se reduce a ir aprendiendo a paso lento y esperando a los demás con esfuerzo cero. El día que necesiten esforzarse para algo no van a tener práctica y van a darse cuenta que en la escuela les han tangado, que les han discriminado para darles una preferencia a los que van mal o cerca de mal. La sociedad es muy puñetera según con qué personas.
Cuando un inspector me dice que lo importante no es saber sujeto y predicado, o complemento directo, que de lo que se trata es de que los alumnos estudien bien. Yo me pregunto ¿cómo si no va a entender alguien por qué no son correctos los siguientes enunciados?:
- Han habido tres accidentes este fin de semana.
- El grupo de las niñas salieron por la puerta.
- El marido la disparó (refiriéndonos a su mujer).
Lo importante es comunicarse, me dice, ni la teoría esa que no vale para nada. Y yo no sé cómo llegar a una cosa sin la otra.
#3 donde dice "estudien bien" quería decir "escriban bien", y donde dice "ni la teoría" es "no la teoría". Me he dado cuenta tarde, sorry.
Licenciada en filología francesa, empezó a trabajar en la enseñanza primaria, secundaria y media de Suecia como profesora de francés y luego también de inglés; posteriormente hizo su tesis sobre literatura española, doctorándose en Letras por la Universidad de Gotemburgo (Suecia). Tradujo varios autores y publicó estudios sobre Miguel de Unamuno, José Ortega y Gasset, María Zambrano, Fernando Savater, Eugenio Trías, Mario Vargas Llosa y Juan Goytisolo; ha traducido la obra de Mario Vargas Llosa y de Juan Goytisolo y ha organizado el Simposio internacional sobre la obra de Tzvetan Todorov (Lund 2004) y el Simposio Internacional Aprender a Pensar (Universidad de Lund, 2005). En la actualidad ocupa la Cátedra de Español en la Universidad de Lund y es asesora del Ministerio de Educación sueco.
https://es.wikipedia.org/wiki/Inger_Enkvist