Hace 8 años | Por Caramierder a elconfidencial.com
Publicado hace 8 años por Caramierder a elconfidencial.com

La fundación de Aznar ha visto reducido su presupuesto de cinco millones en 2011 a la previsión, pendiente de la decisión del Gobierno, de quedarse en menos de dos para 2016

Comentarios

mente_en_desarrollo

#3 Las subvenciones tienen justificación económica en sectores emergentes capaces de eliminar externalidades negativas (como energías renovables) ya que a la larga, es una inversión rentable.

En asesoría política desde luego, no tiene razón de ser.

BillyTheKid

#9 Las "externalidades" debe ser la razón que la Fundación FAEs y otras muchas, sinó todas, invocan para seguir chupando subvenciones mmandurrias

Gunther.Frager

#4 Crees que sería una buena idea abrir una colecta en Meneame para salvar a la FAES?

Campechano

#10 Solo si nos dan un sillón en la junta directiva y decidimos en asamblea quién de nosotros se va a sentar en él. Iba a ser la risión

dphi0pn

#4 Irónico es que es así.

D

Liberales viviendo de subvenciones públicas. Se les caen las caretas con mucha facilidad.

ipanies

Que den mas conciertos!!

ikatza

La hora de la verdad, la de poner en práctica su praxis liberal y abandonar esa constumbre estalinista de subvencionar fundaciones políticas.

Caramierder

Mira que me considero una persona liberal de pensamiento para muchas cosas. Pero que FAES, donde se aloja la carcundia facha, haba bandera del liberalismo, me sienta bastante mal. Estoy convencido de que no es eso, Jose Mari, no es eso.

gonas

#1 ¿FAES y liberal en la misma frase?

ninyobolsa

La encontrarán

hijolagranputa

Pues que hagan como todo el mundo: que vivan de su trabajo y que se dejen de mamandurrias.

D

Estos liberales, partidarios del libre mercado, de prohibir todo tipo de subvenciones (que no sean para ellos), sufriendo y penando por calderilla; que pena me dan.

D

Libegggales probando su própia medicina. Que os aproveche.

piratux

Que busquen un Business Angel.

Campechano

Yo lo llamaría justicia poética

D

a pedir a la mano invisible del Mercado