Hace 9 años | Por --432295-- a arabalears.cat
Publicado hace 9 años por --432295-- a arabalears.cat

La defensa de la secretaria general de CCOO Baleares ha pedido la libre absolución en el juicio, que ha quedado visto para sentencia TRADUCCIÓN: #1

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TRADUCCIÓN: #1


La fiscal que acusa a la secretaria general de CCOO Baleares, Katiana Vicens, de un delito contra los derechos de los trabajadores por coaccionar a un conductor de autobús porque secundàs la huelga general de 2012 ha mantenido, al concluir el juicio, la petición de 4, 5 años de prisión reforzada por el testimonio de un policía.

Por el contrario, el letrado de la defensa ha negado que se haya probado en la vista de este lunes en Palma que la dirigente sindical insultaré el chófer durante la huelga general de 2012 y menos aún que rompiera el cristal del autobús, como afirmó el policía que presenció los hechos a un metro de distancia.

El agente testificó que estaba en la puerta del autobús aparcado en la estación Intermodal de Palma a las 7.20 horas del día de la huelga cuando subieron "varias personas en masa, comenzaron a discutir con el conductor, y una de las personas (a la que identificó posteriormente como Vicens) se abalanzó hacia el cartel de servicios mínimos y del golpe que pegó al vidrio se fracturó ".

"Se tiró hacia el cartel (...) y en el momento que pegó el golpe se cortó el vidrio", recalcó el policía, que no vio si la sindicalista llevaba algún objeto en la mano pero la identificó , ante la indignación de sus compañeros, convencido de que era la responsable de la fractura del vidrio.

Menos claro ha sido el conductor que denunció Vicens, que señaló que la dirigente de CCOO golpeó el vidrio desde dentro del vehículo, mientras que otros sindicalistas lo hacían por fuera, y atribuyó la fractura del vidrio en ambas causas.

En una declaración confusa en varios pasajes, el chófer ha señalado que su único propósito era trabajar y que sintió miedo por los insultos a él ya los viajeros y los golpes que pegaron a los huelguistas en el autobús.

Todas estas acusaciones han sido negadas por Vicens, que ha declarado que ni insultó al conductor de autobús, ni tocó el vidrio que nunca vio roto, e incluso ha señalado que fue el denunciante quien la sacudió "violentamente "a ella sin motivo.

Explicó que para ejercer su "derecho" "intentar que el máximo de trabajadores se sumen a la huelga" en la estación de autobuses de Palma subió sola en un vehículo identificado como de servicios mínimos a punto de partir hacia los pueblos para pedir a sus ocupantes que no acudieran al trabajo.

En este momento, el conductor, "excesivamente nervioso", la cogió del brazo izquierdo y la sacudió, y luego el policía que había al lado de la puerta la sacó del vehículo y le pidió que s'identificàs.

La líder balear de CCOO, con el apoyo en la sala de vistas de numerosos dirigentes sindicales encabezados por el secretario general estatal, Ignacio Fernández Toxo, ha indicado que sospecha que el vidrio se fracturó después del incidente y que el conductor pensó "que alguien se había de comer la hecha ".

Su versión ha sido corroborada por cuatro sindicalistas que han atestiguado a propuesta de la defensa, ninguno de los cuales vio el parabrisas fracturado, ni que Vicens arrancaré el cartel indicativo de que el autobús cumplía los servicios mínimos, pero sí apreció que era el chófer quien cogió su compañera.

Con los relatos del denunciante y el policía que intervino en el altercado, la fiscal Amparo González ha mantenido sus conclusiones iniciales y la petición de pena de 4,5 años de prisión, el máximo posible por el delito contra los derechos de los trabajadores previsto en el artículo 315.3 del Código Penal, además de unos 28.000 euros de multa e indemnización.

La acusadora, que ha pedido sin éxito que Vicens se quitaré un adhesivo con el logotipo de CCOO porque lo consideraba irrespetuoso para el tribunal, ha resaltado que "el derecho de huelga termina en el derecho del trabajador a no hacer huelga" y ha resaltado que hoy no juzgaba "ningún sindicato" sino supuestos delitos penales.

González ha señalado que no le corresponde a ella "ver si la ley está bien o está mal", sino aplicarla, y ha concluido que "es antidemocrático obligar a alguien a hacer lo que no quiere, no sancionar quien lo hace".

El defensor de Vicens, Josep Perelló, ha reclamado la absolución porque entiende que, admitiendo su veracidad, los hechos relatados por la Fiscalía no se ajustan al delito que se atribuye a su representada, sobre todo en un contexto de huelga general y siendo el ejercicio de la protesta laboral un derecho fundamental a proteger.

Perelló lamentó que la fiscal "ni siquiera se haya molestado en justificar" por qué pide la pena máxima para la sindicalista y consideró que no se han aportado pruebas de cargo que demuestren que coaccionar el conductor y que rompió el vidrio del autobús.

Ha reseñado que el perito que informó de la rotura consideró improbable que se pudiera fracturar con un simple golpe y que otros testigos señalaron que había diferentes personas golpeando el parabrisas desde fuera.

Para el abogado defensor, "nadie se puede sentir intimidado" ni insultado porque le digan ardilla y el instinto a dejar de trabajar en el marco de una huelga general.

El juicio, seguido en la sala por numerosos medios de comunicación y sindicalistas, ha sido declarado visto para sentencia por la juez responsable de dictarla, Margarita Beltrán.

u

Mientras el fiscal pide 4 años al de Madrid Arena por 5 muertes...

D

#3 Y la misma fiscalia de Palma retiro las acusaciones a la infanta, la corrupta que decía que cometió un delito por amor.

D

Tiene cojones que hayan vuelto los comisarios políticos como en el franquismo y que estas noticias de fiscales extralimitandose o pidiendo penas máximas según el color del acusado con fines "ejemplarizantes" sean cada vez mas comunes. Como se ve que estos ultraconservadores que tiene colonizada la fiscalia a los que no le tiembla el pulso pidiendo cárcel para ciudadanos que no son delincuentes no tienen miedo de nada. De momento, que sigan reprimiendo con fines políticos que todo se andará.