En la actualidad, el jefe de la Casa del Rey tiene rango de ministro y es una especie de super jefe de gabinete del jefe del Estado, al que informa, asesora, controla, escucha y padece. Consejero-en-jefe, valido, secretario, mano derecha, escudero, centinela, paño de lágrimas. La lista de definiciones del cargo es infinita. Uno de los ellos me explicó así la esencia del puesto más cercano al monarca de todo el organigrama: “Es una relación de amor-odio”.
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1) Fernando Almansa, diplomático y consejero de Telefónica por intercesión de Juan Carlos I.
2) Alberto Aza, diplomático y consejero de Abengoa, junto con su hijo, a petición de Juan Carlos I. De propina, Consejero de Estado.
3) Rafael Spottorno. ¿Adivinan?: diplomático y consejero de Bankia, siempre gracias a la influencia real. Imputado por las tarjetas black.
Toma ejemplaridad.
Vamos, que este es el rey
Sabino ataba corta a su magestá, en cuanto pudo se lo quitó de en medio, pero le costó.
La picha ya la pone Juanca.