Hace 4 días | Por xantl a lasexta.com
Publicado hace 4 días por xantl a lasexta.com

El experto señala la falta de regulación y conocimiento como factores clave en la crisis habitacional actual, y aboga por la necesidad de pactos políticos a largo plazo para enfrentar el problema.

Comentarios

Dragstat

Dentro de 40, los que ahora tienen 20, se van a quedar con más cara de tontos todavía. Puteados a los 20, sufrirán las mayores consecuencias a los +60. Triste historia.

manbobi

Planes a 20 años?
Puedes morir mañana.

r

#1 O dentro de un minuto. Mejor no hacer ningún tipo de plan.

manbobi

#2 Pero 20 años es algo exagerado

tonetti

#1 ¿Tener un hijo?

manbobi

#5 Qué?

tonetti

#6 Tener un hijo es un plan a 20 años.

i

#7 Es un plan a 34 años, que es la edad a la que se te va a ir de casa.

manbobi

#7 Tener un hijo es un hito o una actividad dentro del plan.

tonetti

#9 Vale, tienes razón.

Connect

¿Cómo va a haber natalidad si ni siquiera se puede comprar o alquilar una vivienda? La mayoría de jóvenes tienen que seguir viviendo en casa de sus padres hasta cada vez más pasados los 30. Así no se puede ni pensar en tener una familia. Más cuando la mayoría de ellos/as cuando salen de casa de sus padres, ahora tienen que meterse a compartir vivienda. Ya a los '40 cuando la fertilidad y las ganas se han pasado, muchos piensan en acceder a una vivienda.

B

#4 Ten cuidadín con lo que dices, porque estás implicando indirectamente que está mal hacer nacer a los hijos en la precariedad o la pobreza, lo cual no gusta nada a toda esa gente súper-ética, súper-inteligente, súper-correcta, súper-tolerante con los puntos de vista diversos, y súper-vip que gobierna este sitio web y que considera estupendo y un derecho el poderse hacer nacer a los hijos en la pobreza para que los padres puedan ver satisfechos sus intereses, necesidades y pensiones personales. Esta gente súper-correcta y súper-tolerante con la diversidad de opiniones rebate los puntos de vista diversos con el strike, y porque ya no pueden con la hoguera. Ese es su concepto de "conversación sana".

B

No sé. No creo que este sea un problema que no pueda solucionarse colgándole un par de medallas más a Leonor.

Y, por otra parte, no debe parecerles a los jóvenes proletarios vasallos españoles que la precariedad, la pobreza y el subdesarrollo en que sus propios padres les han hecho nacer sean circunstancias tan horribles, si arden en deseos y defienden como un derecho el poder hacer nacer también, y criar, a sus propias proles en ellas, a que sus proles también reciban en herencia y les agradezcan, en forma de pensiones, esa pobreza, esa precariedad, ese subdesarrollo, ese capitalismo, esa monarquía y ese Reino de España tanto como ellos, los jóvenes proletarios vasallos españoles, los agradecen a sus padres, en la misma forma de pensiones.

Desde esta perspectiva, tener hijos es la manera mas clara y evidente (mas incluso que meter una papeleta en una urna) en que una persona puede mostrar su aprobación favorable del entorno económico o de las condiciones económicas en que dicha persona hace nacer a esos hijos. Pues ¿qué persona ética e inteligente haría nacer a sus propios hijos en un determinado entorno o circunstancia económica si considerase que ese entorno o circunstancia económica es horrible? Las proles, pues, son las papeletas electorales más rotundas, y por tanto las que más ambiciona el capitalismo, capitalismo que no existe gracias a los capitalistas, sino gracias a los proletarios.

El que es pobre es porque quiere votar capitalismo, monarquía y pobreza, con sus votos y con su prole.

Si los proletarios vasallos españoles quieren arreglar la economía con más proles y con más proletarios vasallos en vez de con menos capitalismo y con menos monarquía, están en su derecho, en su costumbre y en su cultura, y se los tenemos que respetar.

El Reino de España, pues, va bien y está bien como está, y la precariedad, la pobreza, el subdesarrollo, el capitalismo y la monarquía son cultura, costumbres, modas, tendencias, derechos, libertades, preferencias, elecciones, votos e hijos de los proletarios vasallos españoles, y se los tienen que respetar así como ellos, los proletarios vasallos españoles, también respetan las costumbres y culturas ajenas.

Y es que el libro de los gustos está en blanco, y la convivencia en una sociedad civilizada debe consistir en que sepamos respetarnos los unos a los otros las costumbres, culturas, derechos, preferencias económicas, criterios progenitores y principios éticos de cada cual, aunque puedan ser muy diferentes a los nuestros.

Así que no permitáis, jóvenes proletarios vasallos españoles, que estas noticias aporófobas desvíen vuestra atención y vuestra ética: no renunciéis a pegaros el gustazo de generar otro baby boom para hacer nacer a vuestras proles en la pobreza o la precariedad, y entregarlas al capitalismo y a la monarquía. Porque la natalidad y las pensiones lo necesitan, y porque aunque en un primer momento quizá podría pareceros mal hacer nacer a vuestras propias proles en la pobreza o en la precariedad, cuando vuestras proles alcancen la mayoría de edad también se volverán defensoras del derecho de hacer nacer a sus propias proles en la pobreza, en la precariedad, en el capitalismo y en la monarquía, a que estos hijos suyos (vuestros nietos) les agradezcan todas estas cosas, en forma de pensiones, tanto como vuestras proles os las agradecerán a vosotros, en forma de pensiones, y tanto como vosotros las agradecéis a vuestros padres, en la misma forma de pensiones. Así que no hay ningún problema con que hagáis nacer a vuestras proles en la pobreza, en la precariedad, en el subdesarrollo, en el capitalismo y en la monarquía, porque vuestras proles os lo agradecerán, en forma de pensiones.

La cultura es la verdadera riqueza, así que dejad en herencia a vuestras proles la rica cultura de la pobreza.

No creáis, pues, a nadie que os diga que hay una guerra económica o lucha de clases, ya sea a nivel intrageneracional o a nivel intergeneracional.

Y recordad que cuando hacéis nacer a vuestras propias proles en la pobreza y la precariedad, no serán los ricos, el capitalismo y la monarquía los que se estén riendo de vosotros, sino que seréis vosotros los que os estaréis riendo de ellos.

Y no dejéis de ponerle medallas a Leonor. Recordad que cuantas más medallas les pongáis a los Borbones, mejor os irá el Reino de España a vosotros, es decir, a ellos, a los Borbones.