El sacerdote Luis Manuel González está siendo noticia este mes de noviembre por varias decisiones que tienen que ver con su enfrentamiento con los vecinos de la parroquia de Albeos, en Crecente (Pontevedra), con los que la situación ha llegado a un punto que el párroco ha decidido ponerse en huelga de misa, tal y como informan desde La Voz de Galicia.
En la parroquia de Anceu vive otro joven cura, que está muy vinculado con la parroquia, Luis Manuel González Piñeiro, quién explicó que esta iglesia llevaba años sin sufrir un robo de estas características.
«Houbo un, hai xa moitos anos, pero o certo é que non quedaba moita cousa de valor dentro, polo que só puideron levar as medallas da virxe», aclaró.
Según González Piñeiro, se trata de unas cadenas de oro «das que as veciñas ou as devotas lles regalan aos santos ás veces. Nós sempre insistimos en que non se faga iso, que non son precisos ese tipo de donativos, pero é un costume que permanece, dependendo do lugar», aclaró.
En cuanto a las posibilidades de que los ladrones se llevasen dinero en efectivo, las descartó «nas igrexas hoxe non hai moitos cartos, e normalmente, retíranse para evitar estes problemas».
El joven párroco explicó que «estes roubos son bastante comúns, e nestes mesmos días temos oído de tentativas similares en Rebordelo, aquí en Ponte Caldelas e na igrexa de Soutomaior. Os ladróns xa saben que no poden levar gran cousa, porque, as coroas das virxes, os cálices e o resto de elementos de valor son moi fáciles de identificar, e quen os comprara podería meterse nun problema gordo e ser denunciado por cómplice, así que, ao final levan as medallas, ou os poucos cartos que poidan atopar».
En el caso de Anceu, en donde no había medidas de seguridad extraordinarias, los asaltantes no se tomaron la molestia de buscar en la sacristía ni de tratar de desvalijar los petos de los santos «en parte porque tiñan moi pouquiñas moedas», explicó el joven cura.
#3#4 Puedo llegar a entender que nos des la información de que el párroco se ordenó en 2013, pero no entiendo qué tiene que ver la noticia del robo en 2014 en otro pueblo con que los vecinos se nieguen a pagar el mantenimiento del cementerio de este otro pueblo, que no es un impuesto revolucionario, es que el mantenimiento no se paga solo y mejor que lo paguen aquellos que lo usan para visitar a sus familiares y los que lo usarán de última residencia, que entre todos aunque ni pertenezcamos a esa religión. Que por cierto, las cantidades no es que sean astronómicas, tres euros al año por cada nicho y uno por cenicero.
Más bien los feligreses se niegan a pagar el impuesto revolucionario a la iglesia.
Luis Manuel González Piñeiro. Nacido hace 26 años en San Andrés de Anceu (Pontecaldelas), recuerda con nitidez la fecha exacta del inicio de su camino. "Fue el 19 de septiembre de 2000, cuando entré en el Seminario Menor", rememora. Tenía solo 13 años y la convicción clara de que quería ser sacerdote. "El buen ejemplo de mi párroco me animó", explica. Y mañana dará por fin un paso para el que lleva formándose desde los 13 años. (…) Para Luis Manuel González, hay una crisis en el sentir religioso y cree que "falta compromiso".
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En la parroquia de Anceu vive otro joven cura, que está muy vinculado con la parroquia, Luis Manuel González Piñeiro, quién explicó que esta iglesia llevaba años sin sufrir un robo de estas características.
«Houbo un, hai xa moitos anos, pero o certo é que non quedaba moita cousa de valor dentro, polo que só puideron levar as medallas da virxe», aclaró.
Según González Piñeiro, se trata de unas cadenas de oro «das que as veciñas ou as devotas lles regalan aos santos ás veces. Nós sempre insistimos en que non se faga iso, que non son precisos ese tipo de donativos, pero é un costume que permanece, dependendo do lugar», aclaró.
En cuanto a las posibilidades de que los ladrones se llevasen dinero en efectivo, las descartó «nas igrexas hoxe non hai moitos cartos, e normalmente, retíranse para evitar estes problemas».
El joven párroco explicó que «estes roubos son bastante comúns, e nestes mesmos días temos oído de tentativas similares en Rebordelo, aquí en Ponte Caldelas e na igrexa de Soutomaior. Os ladróns xa saben que no poden levar gran cousa, porque, as coroas das virxes, os cálices e o resto de elementos de valor son moi fáciles de identificar, e quen os comprara podería meterse nun problema gordo e ser denunciado por cómplice, así que, ao final levan as medallas, ou os poucos cartos que poidan atopar».
En el caso de Anceu, en donde no había medidas de seguridad extraordinarias, los asaltantes no se tomaron la molestia de buscar en la sacristía ni de tratar de desvalijar los petos de los santos «en parte porque tiñan moi pouquiñas moedas», explicó el joven cura.
https://www.diariodepontevedra.es/articulo/noticias/ponte-caldelas-sumo-el-tercer-robo-iglesias-en-una-semana/20140121213900243701.html
#3 #4 Puedo llegar a entender que nos des la información de que el párroco se ordenó en 2013, pero no entiendo qué tiene que ver la noticia del robo en 2014 en otro pueblo con que los vecinos se nieguen a pagar el mantenimiento del cementerio de este otro pueblo, que no es un impuesto revolucionario, es que el mantenimiento no se paga solo y mejor que lo paguen aquellos que lo usan para visitar a sus familiares y los que lo usarán de última residencia, que entre todos aunque ni pertenezcamos a esa religión. Que por cierto, las cantidades no es que sean astronómicas, tres euros al año por cada nicho y uno por cenicero.
Su jefe se va a coger un cabreo de la hostia.
Más bien los feligreses se niegan a pagar el impuesto revolucionario a la iglesia.
Luis Manuel González Piñeiro. Nacido hace 26 años en San Andrés de Anceu (Pontecaldelas), recuerda con nitidez la fecha exacta del inicio de su camino. "Fue el 19 de septiembre de 2000, cuando entré en el Seminario Menor", rememora. Tenía solo 13 años y la convicción clara de que quería ser sacerdote. "El buen ejemplo de mi párroco me animó", explica. Y mañana dará por fin un paso para el que lleva formándose desde los 13 años. (…) Para Luis Manuel González, hay una crisis en el sentir religioso y cree que "falta compromiso".
http://www.farodevigo.es/gran-vigo/2013/06/29/cuatro-vocaciones-recorrido/837308.html
Pues que el cementerio sea municipal, y entonces las tasas pasan a ser 30 € año por nicho y 10 € por cenicero y se acaba el problema.
#5 Cuando se quieran municipalizar los cementerios en el rural gallego se arma la de Dios es Cristo
Pues por una vez, estoy con el cura, vaya jetas los vecinos.
Este lo que quiere es irse al puticlub y ya tiene la excusa
iinsólito