Hace 1 mes | Por nereira a elpais.com
Publicado hace 1 mes por nereira a elpais.com

Menos camas para más madrileños. El número de camas públicas de hospital operativas en Madrid continuó el año pasado con una larga tendencia a menguar, una curva que tiene un sentido inverso al de la población de la región, que no para de subir. La memoria anual del Servicio Madrileño de Salud (Sermas), publicada el mes pasado, muestra que en 2023 hubo un promedio de 11.580 camas funcionantes ―las que realmente están en servicio― en los 34 hospitales públicos, lo que supone una caída de casi 300 con respecto a 2022, de casi 700 desde 2019

Comentarios

C

#4 seguro que la privada ha ganado más. Hay que contar con el aumento de población y los problemas que les ponen a muchos inmigrantes para usar la sanidad pública.

Yosemite

Los madrileños han votado NO a la sanidad pública, parece consecuente

io1976

Se van a morir igual!

ikipol

Seguro que los fodechinchos se van a Galicia a por camas

#13 Está la sanidad gallega para pocas bromas...

Fartucu

Es lo que tiene tener a una mona de feria al volante, La matrioska lunática.

N

¡Pero en cañas han ganado más de 1000!

erfollonero

Pero tienen 1000 veces más libertad, qué envidia los madrileños... En otras comunidades de España nos oprimen con más y mejores servicios públicos, es horrible...

ipanies

Independencia para Madrid ya!!!!!

cocolisto

Siempre queda como recurso la tasca y la cazalla.

Mi seguro de Adeslas de 35€ me garantiza que no las voy a necesitar!
Gracias Ayuso por bajarme 7€ al mes los impuestos!


wall wall

HeilHynkel

La cuenta ahora pa lo del mono.

En breve oferta de plazas libres en los asilos madrileños.

Abrildel21

Hacen falta camas. Ancianos, temblad.

c

Pero quien construye más hospitales ¿ eh ? ¿ eh ?

Tiene coña invertir millonadas en hospitales y cada vez tener menos plazas....

reithor

Ahora están en Quirón, lo mismo que pasó hace unos años con ciertos equipos médicos especializados y muy caros.

B

No sé. No debe parecerles a los proletarios vasallos españoles que la precariedad, la pobreza y el subdesarrollo en que sus propios padres les han hecho nacer sean circunstancias tan horribles, si arden en deseos y defienden como un derecho el poder hacer nacer también, y criar, a sus propias proles en ellas, a que sus proles también reciban en herencia y les agradezcan, en forma de pensiones, esa pobreza, esa precariedad, ese subdesarrollo, ese capitalismo, esa monarquía, esas medallas inmerecidas a Leonor y ese Reino de España tanto como ellos, los proletarios vasallos españoles, los agradecen a sus padres, en la misma forma de pensiones.

Desde esta perspectiva, tener hijos es la manera mas clara y evidente (mas incluso que meter una papeleta en una urna) en que una persona puede mostrar su aprobación favorable del entorno económico o de las condiciones económicas en que dicha persona hace nacer a esos hijos. Pues ¿qué persona ética e inteligente haría nacer a sus propios hijos en un determinado entorno o circunstancia económica si considerase que ese entorno o circunstancia económica es horrible? Las proles, pues, son las papeletas electorales más rotundas, y por tanto las que más ambiciona el capitalismo, capitalismo que no existe gracias a los capitalistas, sino gracias a los proletarios.

El que es pobre es porque quiere votar capitalismo, monarquía y pobreza, con sus votos y con su prole.

Si los proletarios vasallos españoles quieren arreglar la economía con más proles y con más proletarios vasallos en vez de con menos capitalismo y con menos monarquía, están en su derecho, en su costumbre y en su cultura, y se los tenemos que respetar.

El Reino de España, pues, va bien y está bien como está, y la precariedad, la pobreza, el subdesarrollo, el capitalismo y la monarquía son cultura, costumbres, modas, tendencias, derechos, libertades, preferencias, elecciones, votos e hijos de los proletarios vasallos españoles, y se los tienen que respetar así como ellos, los proletarios vasallos españoles, también respetan las costumbres y culturas ajenas.

Así que no creo que este sea un problema que no pueda solucionarse poniéndole un par de medallas más a Leonor.

Y es que el libro de los gustos está en blanco, y la convivencia en una sociedad civilizada debe consistir en que sepamos respetarnos los unos a los otros las costumbres, culturas, derechos, preferencias económicas, criterios progenitores y principios éticos de cada cual, aunque puedan ser muy diferentes a los nuestros.

Así que no permitáis, proletarios vasallos españoles, que estas noticias aporófobas desvíen vuestra atención y vuestra ética: no renunciéis a pegaros el gustazo de generar otro baby boom para hacer nacer a vuestras proles en la pobreza o la precariedad, y entregarlas al capitalismo y a la monarquía. Porque la natalidad y las pensiones lo necesitan, y porque aunque en un primer momento quizá podría pareceros mal hacer nacer a vuestras propias proles en la pobreza o en la precariedad, cuando vuestras proles alcancen la mayoría de edad también se volverán defensoras del derecho de hacer nacer a sus propias proles en la pobreza, en la precariedad, en el capitalismo y en la monarquía, a que estos hijos suyos (vuestros nietos) les agradezcan todas estas cosas, en forma de pensiones, tanto como vuestras proles os las agradecerán a vosotros, en forma de pensiones, y tanto como vosotros las agradecéis a vuestros padres, en la misma forma. Así que no hay ningún problema con que hagáis nacer a vuestras proles en la pobreza, en la precariedad, en el subdesarrollo, en el capitalismo y en la monarquía, porque vuestras proles os lo agradecerán, en forma de pensiones.

La cultura es la verdadera riqueza, así que dejad en herencia a vuestras proles la rica cultura de la pobreza.

No creáis, pues, a nadie que os diga que hay una guerra económica o lucha de clases, ya sea a nivel intrageneracional o a nivel intergeneracional.

Y recordad que cuando hacéis nacer a vuestras propias proles en la pobreza y la precariedad, no serán los ricos, el capitalismo y la monarquía los que se estén riendo de vosotros, sino que seréis vosotros los que os estaréis riendo de ellos.

Y no dejéis de ponerle medallas a Leonor. Recordad que cuantas más medallas les pongáis a los Borbones, mejor os irá el Reino de España a vosotros, es decir, a ellos, a los Borbones.