El paramilitarismo, indisociable del narcotráfico y controlado por sectores próximos al poder político y militar, ha irrumpido como un factor de intimidación que condiciona el desarrollo de la campaña electoral en unos comicios que apuntan a una victoria de la izquierda.
Comentarios
El proxy yanki en Sudamérica, un orgullo de democracia
#1 Se las verán con el proxy ruso de Venezuela.
Y cuando no lo ha hecho...
#2 la voy a votar bulo
Os está quedando un narcocapitalismo muy bonito