Cada año, unos 12 millones de niñas se ven forzadas a contraer matrimonio, una cifra que podría verse incrementada en otras 500.000 más como consecuencia del impacto socieconómico que está teniendo la pandemia de coronavirus. Hasta un millón más podrían quedarse embarazadas. Ese es el resultado del análisis realizado por Save the Childre. Anunque el aumento es "una estimación conservadora" no deja de ser significativo puesto que, "supone revertir 25 años de progreso, en los que se había conseguido reducir las tasas de matrimonio forzoso.
Comentarios
la pandemia podría empujar a la gente a hacer click en el titular
#3 No veo el problema en fomentar que la gente se informe sobre esta injusticia.
#10 veo problemas en identificar una crítica al periodismo
Sugiero mejor "la pandemia podría empujar a medio millón de bebés al matrimonio". Mucho más super impactante tía, y más clics.
#2 Bebés en general no. Parece que el problema afecta particularmente a las niñas.
#9 La hembra humana cuando tiene cuerpo de mujer deja de ser una niña.
"El cansinismo podría empujar a M.S. a mandar medio millón más de noticias sobre el mismo puto asunto"
#4 Que mande lo que le dé la gana, si no te gusta no entres o vota negativo ( como hacéis)
#5 Aplícate el cuento y déjame comentar en conciencia.
#6 Aplicatelo tu primero
#7 No cari, cuelga tú.
El razónamiento, del agravamiento de un mal.
Y también les fuerza a pasar hambre, a quedarse sin casa, a morir ahogánose sin asistencia sanitaria, a quedarse hurfanos....
Este virus simplemente ataca a los mas pobres pues son los que tienen menos recursos para mantenerse pero estas personas solo ven el matrimonio como el problema al que hay que combatir. Es como cuando quieres combatir la delincuencia en un barrio pobre.
Si a unos padres sin estudios y sin saber como alimentar su familia le dices que si casa a su hija con un tipo adinerado, te va a decir si por mucha moral de ocidente que les llevemos allí. Esos padres podrán alimentar al resto de sus hijos y saben que si hija tampoco padecerá por no tener que comer. Nos guste o no, es SU realidad. La nuestra es otra, mucho mas cómoda y protegida y nos encanta viajar a otros paises a decirles como tienen que vivir y sentir pero con la tarjeta de crédito en el bolsillo para poder volver a casa en cualquier momento si la cosa se pone fea. Ellos son los que se quedan allí, con su miseria. Eso es lo primero que hay que tratar, su miseria. Luego ya hablaremos de exportar nuestros dogmas morales y los 10 mandamientos si toca.